UNAL Sede Orinoquia recibe nuevos estudiantes y entrega 2.000 pines gratuitos para el próximo semestre
El calendario académico de la Sede Orinoquia continuó con total regularidad, según afirmó su directora, la profesora Adriana Isabel Orjuela Martínez, con el inicio de la semana de inducción el 29 de julio como preámbulo al inicio de clases, que será el 5 de agosto. “La Institución busca fortalecer el movimiento estudiantil, pensar una forma administrativa que responda a las necesidades de un enfoque realmente territorial, y enriquecer la participación de las comunidades de la región en la Universidad”, aseguró la directiva.
Esta semana los nuevos estudiantes admitidos en la sede Orinoquia participarán en jornadas de mañana y tarde, en las charlas de la presentación del cuerpo docente y el reconocimiento de las instalaciones, acompañados de actividades y palabras de bienvenida por parte de las áreas de Bienestar, Informática, Divulgación Cultural, Investigación, Extensión, Biblioteca, y la Granja Experimental El Cairo, entre otras.
También conocerán los beneficios y servicios que ofrece el Área de Bienestar Universitario, acompañados con presentación de baile folclórico como bienvenida al periodo académico.
Julieth Pinzón, coordinadora de Bienestar Universitario, señaló que “el objetivo de esta semana de inducción es sembrar la semilla del sentido de pertenencia a la Universidad, con actividades que pretenden mostrar sus áreas, dar claridad sobre los procesos académicos, realizar actividades más dinámicas en las que los estudiante participen activamente del proceso de aprendizaje y logren una mayor apropiación de los espacios de la Institución”.
“Con el fin de lograr que más estudiantes tengan la oportunidad de realizar su pregrado en los programas ofrecidos por la UNAL Sede Orinoquia y aumentar el número de admisiones, se pusieron a disposición 2.000 pines gratuitos para bachilleres de estratos 1, 2 y 3 que hayan realizado los grados décimo y once en la región”, explica Yelli Belén Rojas Mojica, secretaria de la Sede.
El requisito que deben cumplir los aspirantes es ser habitantes de la zona de influencia de la UNAL Sede Orinoquia, es decir Arauca, Casanare, Guaviare, Guainía y Vichada, además del municipio de Cubará (Boyacá), los corregimientos de Samoré y Gibraltar del municipio de Toledo en Norte de Santander, y los municipios de la Macarena, Mapiripán y Puerto Concordia en el Meta.
Los jóvenes podrán acceder a los pines gratuitos en la página oficial de la UNAL Sede Orinoquia: https://orinoquia.unal.edu.co/ y a través del formulario en línea: https://forms.gle/P3FuvQBiEaZSE9mMA, hasta el viernes 9 de agosto de 2024 o antes, si se agotan los pines disponibles. Cada bachiller tendrá acceso a un solo pin.
Se debe tener en cuenta que después de llenar el formulario en línea y obtener el pin, el candidato tendrá que formalizarlo en la página de Admisiones de la UNAL para quedar inscrito correctamente. A partir de ahí quedará a la espera de la fecha del examen de admisión que se publicará en la misma página.
Si el postulante forma parte del “Registro de comunidades indígenas o víctimas del conflicto” no es necesario que solicite el pin, pues los miembros de estas comunidades ya aparecen en el Registro Único de Victimas (RUV) o en los censos de Resguardos Constituidos - Delimitación Territorial, y tienen inscripción gratuita directamente. Para más información puede comunicarse directamente con la Sede Orinoquia y obtener asesoría para el proceso, según el caso de cada postulante.
El proceso de inscripciones para el periodo 2025-1 cerrará pronto. Los bachilleres interesados tienen hasta el 14 de agosto para formalizar su registro a través del pin, y a partir del 9 de septiembre se dará a conocer la citación para la prueba de admisión para su presentación el domingo 22 de septiembre.
Esta iniciativa les da la oportunidad a 2.000 aspirantes de evitar la compra de pin, el cual normalmente tiene un costo de 130.000 pesos, y con este los bachilleres pueden presentar el examen de admisión a la UNAL 100 % gratuito, con el objetivo de promover el acceso de los jóvenes de las regiones más apartadas a una educación superior de calidad y desde allí seguir aportando al desarrollo de la región fronteriza.