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Uno de los propósitos del Plan de Desarrollo Buriticá, municipio del occidente de Antioquia, es garantizar la ejecución de las propuestas incluidas allí.
Al respecto, el profesor Oswaldo Ordóñez, de la Facultad de Minas y coordinador del proyecto, señala que "se volvió costumbre rellenar los planes de desarrollo con metas ilusorias e imposibles de cumplir, dados los bajos presupuestos de los municipios".
En una consultoría adelantada el año pasado para la Unidad de Planeación Minero Energética (UPME) sobre cómo se concibe el desarrollo en territorios minero-energéticos, se estudiaron los municipios de La Jagua de Ibirico, Mosquera y Buriticá.
En reuniones celebradas en Buriticá se entablaron relaciones con los candidatos a la Alcaldía, y al elegido, Luis Hernando Graciano, se le propuso acompañamiento de la UNAL en la elaboración del Plan de Desarrollo Municipal 2020-2023, el cual se estructuró entre febrero y abril.
Infraestructura, la prioridad
Entre los aspectos destacados por el profesor Ordóñez como positivos de este Plan están el diseño de proyectos en sus ejes de gobernanza, justicia y seguridad; equidad social e inclusión; educación, deporte y cultura; gestión ambiental sustentable y gestión del riesgo; y emprendimiento económico.
El docente menciona que uno de sus fundamentos es el mejoramiento y mantenimiento de infraestructura, con una ambiciosa meta de realizar el 100 % de los proyectos de infraestructura comunitaria y espacio público.
Buriticá posee una topografía abrupta y cuenta con centros poblados dispersos en el territorio; por eso son esenciales aspectos como el mejoramiento y mantenimiento de la malla vial y de los caminos.
Además, con la UPME y el Ministerio de Minas y Energía se adelanta un proyecto para establecer una zona de desarrollo territorial en torno al proyecto minero-energético de Buriticá.
Este municipio tiene dos proyectos de interés nacional y energético (PINE): Hidroituango, que aportará el 17 % de la demanda energética del país, y el Proyecto Buriticá, de Continental Gold, empresa minera de oro a gran escala, adquirida recientemente por la empresa china Zijin Mining, que legalizó la extracción en la zona, pues había graves problemas de extracción ilegal.
"Buriticá recibirá recursos de regalías, por lo que se debe preparar para que esa riqueza se revierta en desarrollo sostenible e inclusión para la población del municipio y las regiones aledañas", afirma el docente.
El equipo de trabajo de la Universidad se ha reunido con compañías mineras, con Empresas Públicas de Medellín, propietaria de Hidroituango, y con firmas de construcción, para hablar de la necesidad de construir vías y de su aporte a la planeación y al desarrollo territorial. La expectativa está centrada en proyectos de responsabilidad social empresarial.
La Universidad, por su parte, liderará dos proyectos: llevar educación del siglo XXI a las escuelas rurales con tecnología, y promover el modelo smart farming, o granjas con inteligencia artificial.
Este Plan de Desarrollo tiene como valor agregado la asesoría de la UNAL para el desarrollo del territorio desde la academia y la ciencia, que es su objeto misional, mediante el trabajo multidisciplinar de economistas, ingenieros, geólogos y sociólogos, entre otros profesionales, sumado al apoyo de alumnos de diferentes disciplinas.