UNAL Sede de La Paz se compromete con la ciénaga de Zapatosa

Asocenagoza tiene como objetivo fortalecer la región y la integración territorial para promover el desarrollo en diferentes temas identificados por la propia comunidad.

En los cinco municipios que componen la Asociación: Chiriguaná́, Tamalameque, Chimichagua y Curumaní, en el Cesar, y El Banco, en Magdalena, uno de los temas principales es la conectividad, pues tienen grandes dificultades con las vías y el acceso a medios de transporte que les permitan impulsar su desarrollo económico, las cadenas productivas y el bienestar de las comunidades.

Además se trabajará en mejorar las condiciones de saneamiento básico –agua potable, acueductos, manejo de residuos sólidos–, reactivar la economía regional y fortalecer esquemas de conservación del medioambiente y del ecosistema, pues son conscientes del espacio privilegiado que representa la ciénaga, con su fauna, flora y recurso hídrico, todo esto ligado además a un profundo arraigo cultural.

“Los esquemas de asociatividad territorial permiten romper la organización política de municipios y departamentos para tratar de que las comunidades se unan según sus identidades regionales y así generar esquemas de cooperación y alcanzar metas de desarrollo”.

Así lo explica el profesor Jimmy Jolman Vargas, director de Investigación y Extensión de la Vicerrectoría de la UNAL Sede de La Paz, quien forma parte del equipo de académicos de la Institución que desde el año pasado se ha sumado a esta iniciativa, impulsada por las concejalas de Tamalameque (Cesar) Yajaira Montesinos y Martha Manzano.

Pacto funcional

En un segundo momento, la UNAL Sede de La Paz brindará más presencia y apoyo en la parte técnica, acompañando propuestas puntuales desde la investigación y el desarrollo regional.

Aunque hoy se encuentran en fase de planeación y diagnóstico, la idea es que la Universidad acompañe las iniciativas generadas en la región, relacionadas con proyectos identificados como problemáticas o aspectos principales a trabajar.

Una posibilidad para llevar a cabo esta segunda etapa son los pactos funcionales, a través de los cuales se trata de identificar las vocaciones de las regiones, generar nexos en los territorios y promover el desarrollo regional mediante de la gestión del conocimiento y la gestión pública.

El profesor Vargas señala que “en el caso específico de este complejo cenagoso se identifica como posible vocación principal el turismo. Sin embargo, para llegar a este punto se deben fortalecer muchos aspectos de conectividad, saneamiento y conservación, entre otros”.

De importancia latinoamericana

Además de la Serranía del Perijá y la Sierra Nevada de Santa Marta, la ciénaga de Zapatosa es uno de los escenarios ambientales más importantes del Cesar, por lo que en 2018 fue declarado como sitio Ramsar, es decir como un humedal de importancia internacional.

También es uno de los cuerpos de agua más importantes de América Latina y provee sustento a gran cantidad de los pobladores de la zona centro del departamento; sin embargo ha sido escenario de situaciones históricas complejas de desplazamiento y explotación de recursos naturales, entre otras.

La ciénaga tiene cerca de 40.000 hectáreas y 1.000 millones de m³ de agua, y tiene gran variedad de fauna y flora. Ha sido un territorio estratégico local y nacional por su relevancia histórica, productiva y por su riqueza natural y cultural.

La UNAL Sede de La Paz adelantó una investigación referente relacionada con la riqueza natural de la zona, la cual se constituyó tal vez en la caracterización biológica más importante de la ciénaga. Además generó el “Primer encuentro de municipios con influencia sobre la ecorregión en la ciénaga de la Zapatosa: modelos de asociatividad territorial para un desarrollo conjunto”.

“Tenemos un interés grande y hemos utilizado un documento base, el Plan de Ordenamiento y Manejo de la Cuenca Hidrográfica (Pomca) del río Cesar y la ciénaga de Zapatosa, desarrollado por Corpocesar, que aborda temas medioambientales, sociales y culturales”, señala el profesor Vargas.

Agrega que la UNAL Sede de La Paz busca visibilizar estas problemáticas y trabajar sobre las necesidades regionales para potenciar procesos de conservación y para que su riqueza natural se utilice de la manera más apropiada posible.

La comunidad, por su parte, espera que con la generación de conocimiento mejoren sus condiciones de vida y el estado de conservación de la ciénaga, entre otros aspectos.