UNAL le cumple al país con la construcción de las fases 1 y 2 del campus de la Sede Tumaco
La UNAL Sede Tumaco se creó en 1997 y se puso en marcha en 2009 con la creación del Instituto de Estudios del Pacífico, una unidad académica que dio pie para que en 2012 se adquiriera un predio en la vía nacional entre Tumaco y Pasto para ubicar el campus, lugar con 44,7 hectáreas que desde ese momento ha sido la casa de cientos de estudiantes que buscan en la UNAL una oportunidad para aportar a su territorio.
La profesora Dolly Montoya Castaño, rectora de la UNAL, asegura que “el proyecto de infraestructura que se recibió tenía problemas estructurales de diseño, por eso la Universidad luchó durante 5 años para que al final se aclarara todo el camino, recuperando el recurso invertido para avanzar con una nueva licitación, la cual ya está abierta, así como su interventoría, y todo iniciará el siguiente año”.
El profesor Pablo Enrique Abril, vicerrector General de la UNAL, agrega que “en 2018 esta administración recibió el contrato de la obra civil de la fase 1 en curso, pero en el desarrollo de la obra se detectaron inconvenientes técnicos relacionados con el diseño de cimentación, producto del terreno arenoso que constituye el campus, así que se necesitaron ajustes con el fin de garantizar el cumplimiento de la norma de sismorresistencia y la seguridad de las personas. Por esa razón el contrato se suspendió por siete meses durante 2019”.
Por su parte la profesora Amanda Lucía Mora, directora de la UNAL Sede Tumaco, indica que “después de reiniciar la construcción de la fase 1 llego la pandemia derivada de la pandemia por COVID-19, que también llevó a la suspender la obra por un mes, y al retomar las actividades el contrato de obra civil para la construcción de esta fase finalizó por vencimiento de plazo contractual en septiembre de 2021, con un avance físico del 21 % y una ejecución financiera del 35 %”.
En este sentido, el vicerrector Abril expresa que “las circunstancias acaecidas en torno a la fase 1 generaron grandes retos institucionales, pues para continuar era necesario liquidar los contratos que se recibieron en ejecución, según la normatividad aplicable, para poder liberar el objeto contractual y el recurso financiero, y poder así arrancar una nueva licitación”.
“Después de la pandemia aumentaron los costos de materiales como el acero y otros componentes arquitectónicos, por lo que se tuvieron que buscar nuevos recursos, los cuales se lograron con el apoyo del Gobierno regional, el Sistema General de Regalías y la cooperación internacional y se pudo abrir de nuevo el proyecto para llevar a buen término estas construcciones tan necesarias para seguir fortaleciendo la presencia de la Universidad en Tumaco”.
Como resultado de la gestión liderada por la Rectoría, la Vicerrectoría General y la Dirección de la Sede Tumaco, hoy se cuenta con los cerca de 100.000 millones de pesos que se invertirán en los contratos de obra e interventoría; de estos, la UNAL aportó el 41 % con recursos propios; el Sistema General de Regalías del Fondo de Compensación Regional del Pacífico contribuyó con un 36 %, y por último se destaca la cooperación del Reino de los Países Bajos, que aportó el 23 %.
“Es importante aclarar que en algunas oportunidades se mencionaron fechas que no se pudieron cumplir, debido a que la etapa precontractual se prolongó; pero ahora con la apertura de la invitación pública se tiene un cronograma que se debe cumplir, según el cual el acta de inicio se estaría firmando en febrero de 2024, y el proceso de liquidación se llevaría a cabo en el primer trimestre del 2026”, asegura la profesora Mora.
La rectora de la UNAL anota que: “definimos con la comunidad tumaqueña la educación superior que se necesitaba en el territorio, y con la ayuda de los parlamentarios de la región, la Sede, y el Congreso, ahora tenemos 200 profesores para las Sedes de Frontera de la Universidad, de los cuales un poco más de 50 llegarán a Tumaco. Este logro se suma al hecho de que el siguiente año tendremos programas de pregrado completos en esa sede, como Derecho y Enfermería”.
Por último, el vicerrector Abril recalca que “se espera que el campus beneficie alrededor de 2.000 personas cuando esté finalizado y en operación, una cifra muy importante para uno de los nueve campus que ha construido la UNAL a lo largo del territorio nacional, que desde 2015 abrió las puertas a los más jóvenes con el Programa Especial de Admisión y Movilidad Académica (Peama), que ha tenido una gran demanda. A través de él se presentan cerca de 1.200 jóvenes cada semestre, de los cuales alrededor de 220 ingresan a la Institución”.