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Ciudad y Territorio

UNAL inaugura plazoleta en el campus El Cable para la comunidad manizaleña

    Se trata de un espacio abierto y de fácil acceso, pensado para el disfrute y la integración de estudiantes, profesores y de la comunidad manizaleña. Este proyecto –con una inversión de alrededor de 760 millones de pesos– fue financiado con recursos de la Estampilla aportados por la Gobernación de Caldas y el municipio de Manizales, consolidando una iniciativa que reafirma la vocación de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Manizales de generar espacios que integren historia, accesibilidad y sostenibilidad.

    La plazoleta del campus El Cable representa un hito, pues combina el rescate de su historia con la funcionalidad de un espacio moderno. La historiadora Yeimy Paola Delgado Arcila, coordinadora del proyecto Cultural Patrimonial UNAL Sede Manizales, relató que “el Cable Aéreo Mariquita-Manizales, inaugurado en 1922, fue el sistema de transporte aéreo más largo del mundo en su época, con 72 km y 22 estaciones, que conectaban Mariquita y Manizales”.

    Esta infraestructura de la ciudad fue construida por la empresa británica The Ropeway Extension Company; el proyecto estuvo dirigido por el ingeniero James Lindsay, quien enfrentó desafíos como el hundimiento de una torre en construcción durante la Primera Guerra Mundial, lo cual llevó a erigir en madera algunas estructuras, como la Torre de Herveo.

    Dicho sistema fue esencial para el transporte de mercancías y materiales, especialmente para la reconstrucción de Manizales tras el incendio de 1925; operó hasta 1967 y hoy su legado se celebra mediante la Torre El Cable y la antigua estación La Camelia, ambas declaradas como Conjunto Patrimonial del Sistema del Cable Aéreo.

    El profesor Camilo Ernesto Mejía Clavijo, director de Ordenamiento y Desarrollo Físico de la UNAL Sede Manizales, expresó que esta renovación se rige por los principios de durabilidad, transparencia y permeabilidad. Estos conceptos no solo permiten crear un espacio visualmente atractivo, sino que además brindan confort, seguridad y facilidad de acceso para todos los usuarios.

    “La plazoleta es un proyecto que refleja el compromiso de la Universidad con la comunidad manizaleña y con el cuidado del entorno histórico y natural que nos rodea”, dijo.

    Para el sano disfrute de la sociedad manizaleña

    La obra fue diseñada para cumplir varias funciones. Su diseño geométrico, inspirado en la arquitectura tradicional cafetera, se enfoca en facilitar la interacción y el encuentro. Las graderías dispuestas estratégicamente permiten dos visuales esenciales: una hacia una pantalla de proyecciones, ideal para actividades culturales y académicas, y otra hacia el Monumento Nacional.

    Durante la noche, una iluminación especial destaca cada rincón de la plazoleta, volviéndola un espacio seguro y acogedor para toda la ciudadanía, que podrá disfrutar de eventos y actividades al aire libre en el centro de Manizales.

    En cuanto al acceso, uno de los retos principales fue conectar la plazoleta con la avenida Lindsay y la avenida Santander, que se encuentran a diferentes niveles. Para solucionar este percance, el diseño contempló rampas y accesos adaptados, permitiendo que cualquier persona, sin importar sus capacidades físicas, pueda circular libremente por el espacio.

    La Universidad también implementó un plan de renovación ambiental. En colaboración con la Corporación Autónoma Regional de Caldas (Corpocaldas), la Secretaría de Planeación y otras entidades locales, se realizó una evaluación de la flora local y del estado de algunos árboles en el campus.

    Dos palmas en mal estado, una en la plazoleta y otra en una terraza del campus, fueron removidas para evitar riesgos. Esta intervención se llevó a cabo bajo la supervisión de Corpocaldas, y con el compromiso de reemplazarlas por especies nativas, reforzando el compromiso de la Institución con la sostenibilidad y la conservación ambiental.

    Contribución a la biodiversidad de la región

    El proyecto contempló la siembra de más de 60 especies nativas en el sector de La Nubia y se integraron áreas verdes en El Cable, promoviendo un entorno que no solo embellece el campus, sino que además contribuye a la biodiversidad de la región.

    “Cada decisión en este proyecto se tomó en conjunto con entidades especializadas, asegurándonos de cumplir con las normativas ambientales y de respetar el entorno”, señaló el profesor Mejía, resaltando la importancia de esta colaboración interinstitucional.

    La plazoleta del campus El Cable no es solo un proyecto arquitectónico, es una apuesta por la cohesión de la comunidad universitaria y de Manizales. La Vicerrectoría de la Sede, liderada entre 2021 y 2024 por el profesor Neil Guerrero González, y la actual vicerrectora, Belizza Janet Ruiz Mendoza, han respaldado este espacio como una obra de impacto para el bienestar de todos.

    Entre los profesionales de la UNAL que trabajaron en conjunto para materializar esta obra están María Juliana Hernández, Jorge Hernán Jiménez, Alejandro Buriticá, Marcela Gama, y la arquitecta Lucero Torres. “Este proyecto es el resultado de un esfuerzo colectivo que combina sensibilidad arquitectónica y compromiso con la calidad de vida de la comunidad”, destacó el profesor Mejía.

    La inauguración oficial de la plazoleta contó con la presencia de figuras representativas de la región como el alcalde de Manizales, Jorge Eduardo Rojas Giraldo, y varios miembros de su gabinete. También estuvieron presentes secretarios de despacho de la Gobernación de Caldas, concejales de la ciudad y diputados del departamento. La participación de autoridades y ciudadanos fue una muestra del compromiso compartido entre las instituciones locales y la Universidad para desarrollar espacios que promuevan la inclusión y la convivencia.