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Salud

UNAL capacitó a personal de la salud de Tumaco en reanimación cardiopulmonar

    La técnica de la reanimación cardiopulmonar (RCP) es una maniobra que permite salvar la vida de una persona en los primeros minutos de padecer un episodio cardiorrespiratorio. Aunque el conocimiento de su aplicación se exige al personal de la salud, en países como Colombia esta tiene un costo económico. La Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Tumaco, a través de la Facultad de Medicina de la Sede Bogotá, capacita de manera gratuita al personal del Hospital San Andrés.

    A través de las capacitaciones se busca fortalecer el buen uso de los desfibriladores manuales (dispositivo médico electrónico que permite tratar un paro cardiorrespiratorio) con los que cuenta el Hospital de Tumaco.

    También, que médicos, auxiliares de enfermería o radiólogos, entre otro personal de la salud, aprenda a identificar un ataque cardíaco o un ahogamiento, en los que la respiración o los latidos del corazón del paciente se han detenido.

    Aunque el personal de salud del Hospital de Tumaco se ha capacitado en reanimación básica para reconocer un paro cardiorrespiratorio, comprobar la conciencia y la respiración del paciente, iniciar compresiones torácicas, insuflaciones de rescate y volver a las compresiones, siempre es importante estar a la vanguardia de los nuevos métodos y técnicas que permitan salvar vidas y mejorar la calidad del servicio.

    “La capacitación certificada en reanimación básica para el personal hospitalario ofrecida se dividió en tres partes: cómo dar compresiones y ventilaciones en un paciente que sufre una pérdida de conocimiento o síncope; cómo manejar un dispositivo electrónico portátil, el cual diagnostica una parada cardiorrespiratoria cuando es generada por una fibrilación ventricular o por una taquicardia ventricular sin pulso, permitiendo restablecer el ritmo cardíaco; y cómo sacar una persona del atoramiento, es decir obstrucción de vía área por cuerpo extraño”, explica el profesor José Ricardo Navarro, de la Facultad de Medicina.

    Agrega que si “el personal de salud no sabe cómo se utiliza un desfibrilador automático externo, prácticamente se está perdiendo una oportunidad de salvarle la vida a una persona”.

    El medico Navarro recordó además que “si una persona sufre un paro o una pérdida de conciencia, el personal de salud debe actuar de manera inmediata, el tiempo es muy importante para la vitalidad del cerebro”.

    Esta es una de las razones por las que al personal de la salud se le exige mantenerse en renovación y actualización de los conocimientos en esta área, al menos cada dos años.

    Marina Isabel Quiñones Prado, enfermera jefe del Hospital de Tumaco, afirmó que “como personal operativo es muy importante que la Nacional les haya brindado esta capacitación en reanimación básica y avanzada”.

    “Esto nos permite fortalecer y afianzar los conocimientos que nos ayudarán de forma efectiva a minimizar el riesgo en los pacientes que entran en estado crítico y necesitan una atención de forma inmediata, logrando salvaguardar la vida, que para nosotros es lo más importante, tanto en la parte intrahospitalaria, como extra hospitalaria”.

    Javier Polo Guerrero, médico general del área de Cirugía y Quirófano, del mismo centro hospitalario, dijo: “agradecemos a la Universidad por esta capacitación, ya que al realizarla de manera independiente tiene un costo, por eso hay que aprovechar este espacio al máximo”.

    Por su parte, la profesora Amanda Lucía Mora Martínez, directora de la UNAL Sede Tumaco, comentó que “este esfuerzo permite avanzar hacia la gestión del conocimiento”.

    LA UNAL Sede Tumaco seguirá aunando esfuerzos para seguir brindando espacios formativos, teniendo en cuenta que la prevención de la enfermedad y la promoción de la salud son más económicas que los tratamientos de las enfermedades, y más en las comunidades del Pacífico.