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Salud

“UN por Colombia”, del cuidado bucal a la salud integral en los territorios

    Desde hace dos años, además de las tradicionales brigadas de salud bucal, “UN por Colombia”, programa bandera de la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), viene desarrollando una estrategia de salud integral con comunidades indígenas y campesinas de Ortega y Líbano (Tolima), San Vicente del Caguán (Caquetá) y La Macarena (Meta).

    “UN por Colombia” es un grupo de extensión universitario que hace 23 años llega a los territorios más alejados del país como La Guajira, Amazonas, Meta, Caquetá y Cauca, brindando salud bucodental a la población más vulnerable. Durante varios años esta iniciativa fue liderada por la profesora Clara Patricia Acuña, su creadora.

    Conformado en la actualidad por 16 profesionales y estudiantes de cuarto a noveno semestre de Fonoaudiología, Odontología y Psicología, dicho grupo busca ahora darle otra mirada a la salud oral y a la comunicativa, donde la boca se convierte en un espacio para la comunicación, la expresión y lo estético.

    Por ejemplo, en Ortega, ubicado a 45 minutos de Espinal, la comunidad indígena pijao El Vergel-Calarma afronta problemas de desnutrición y deficiencia en el suministro de agua. Allí trabajan con 40 niños.

    El profesor Edson Jair Ospina, coordinador encargado del grupo, señala que “la falta del acceso a la alimentación básica hace que se presenten problemas de desnutrición, desarrollo y aprendizaje en la comunidad, en especial en los niños y jóvenes”.

    Además, “afrontan enfermedades crónicas como hipertensión y endémicas como parásitos, debido a la falta de acceso a servicios de salud; pocas veces han ido al médico porque el centro de salud les queda a más de dos horas de camino y la atención no es continua”.

    Niños y jóvenes replicadores de la buena salud bucal

    También realizan acciones con 120 niños y jóvenes campesinos de entre 5 y 14 años, de las escuelas de Morronegro, Tierradentro y Honda. En las brigadas se ha encontrado serios problemas de caries que les han provocado la pérdida de sus dientes debido a una inadecuada higiene oral.

    Aunque el centro de salud cuenta con las dotaciones necesarias para prestar un buen servicio, y se encuentra a escasos 15 o 20 minutos de distancia, la carretera está en malas condiciones e impide el paso de vehículos, entre ellos, ambulancias.

    Antes estos escenarios con los que se han encontrado durante sus visitas a los territorios, el equipo de “UN por Colombia” viene apostando por realizar acciones más enfocadas hacia una salud integral, en la que la boca se convierte en un espacio para la comunicación, la expresión y lo estético.

    El profesor Ospina menciona que en estos espacios se vienen promoviendo actividades de salud oral en el ámbito escolar, de manera que “estas generaciones comprendan la importancia del cuidado de sí mismos, para contribuir a la formación de una autoestima sana: si te amas te cuidas”.

    Hace un mes viajaron a San Vicente del Caguán y la Macarena para atender a 120 personas entre civiles y reincorporados de las FARC. Además de la atención clínica, se realizaron actividades de intercambio de saberes ancestrales y el uso de plantas medicinales, como parte de la construcción de un plan de salud integral.

    La precaria situación de salud en la región se debe principalmente a la ausencia de servicios de salud en el territorio, el deterioro creciente y la ausencia física de la red pública en salud y el incumplimiento de las aseguradoras en salud.

    Los problemas predominantes en la región son las enfermedades infecciosas (como leishmaniasis, parasitarias, etc.) y crónicas (hipertensión, diabetes, obesidad, caries dental), entre otras.

    Además, la violencia intrafamiliar y las violencias basadas en género, los homicidios y los problemas de salud mental relacionados con las secuelas de la guerra y el control armado que se ejerce sobre el territorio, fueron notorios en las visitas realizadas por los profesionales a las casas de los pobladores.

    El profesor Ospina, menciona que “los estudiantes quieren conocer el país y ser parte de las transformaciones de la comunidad y esto es posible si se sale de las aulas de clase y se empieza a trabajar en procesos de extensión que se mantengan en el tiempo a través de las nuevas estrategias pedagógicas y vivenciales”.