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Medioambiente

Todavía es posible frenar el deterioro del río Tota

Detener el deterioro del río Tota, que atraviesa los municipios de Tota, Cuítiva e Iza, todavía es posible si estas comunidades controlan sus vertimientos a la pequeña fuente.

El aumento de los niveles de nitrógeno y fósforo en la fuente está empezando a cambiar las condiciones de las aguas y esto afecta su calidad para el consumo humano, agrícola y ganadero, afirmó el profesor John Charles Donato Rondón, vicedecano académico de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional de Colombia, quien actualmente dirige la investigación "Estudio de la ecología de un arroyo de los Andes colombianos: el río Tota".

El enriquecimiento de nutrientes o contaminación de las aguas del Tota es el resultado de los residuos de fertilizantes utilizados en agricultura, de los desechos de actividades industriales y de las aguas residuales de las poblaciones situadas en la cuenca de 340,6 kilómetros cuadrados.

La situación del pequeño río, que nace en el Páramo de las Alfombras, entre los municipios boyacenses de Tota, Aquitania y Pesca, es estudiada actualmente por cinco biólogos de la UN de Colombia (dos de doctorado y tres de maestría).

"Estamos trabajando sobre los efectos de la fertilización (contaminación) sobre las comunidades biológicas del río debido al cambio climático", dijo el profesor.

A pesar de las descargas de desechos que recibe la fuente de agua, Donato Rondón afirmó que el Tota no está muy contaminado y todavía mantiene su carácter oligotrófico, es decir que es muy pobre en nutrientes contaminantes.

La predicción del impacto de la fertilización o contaminación de la fuente hídrica es una de las conclusiones de las investigaciones en curso, cuyos costos básicos actuales son asumidos por los estudiantes porque los recursos asignados para esos proyectos ya se agotaron, explicó el vicedecano académico.

Las investigaciones, realizadas desde 1997 hasta la fecha, han sido posibles por la financiación de la División de Investigaciones de la UN en Bogotá (DIB), Colciencias, Banco de la República y a la Fundación BBVA. "Esperamos seguir contando con su apoyo para continuar con los estudios en curso", dice el profesor Donato Rondón.

Finalmente, el vicedecano Donato Rondón afirmó que para controlar la afectación de los bienes y servicios que ofrece el río es importante que las comunidades urbanas y rurales, las industrias y las autoridades ambientales, civiles y policiales tomen las medidas requeridas para evitar que estas sustancias sigan cayendo a la fuente.

Esto significa que las cerca de diez mil personas que integran las comunidades que se benefician del río Tota todavía están a tiempo de detener su deterioro, pues la fuente está relativamente conservada, y por eso deben replantear sus relaciones con la ecología.