Escudo de la República de Colombia Escudo de la República de Colombia
/Software facilita diagnósticos odontológicos
Ciencia y Tecnología

Software facilita diagnósticos odontológicos

    Maxila es un dispositivo desarmable que busca aumentar la precisión de los diagnósticos médicos desde el punto de vista odontológico clínico y darle al paciente mayor participación en la toma de decisiones sobre los tratamientos. Esta tecnología fue creada por un grupo de investigadores y estudiantes de pregrado, maestría y doctorado de la Escuela de Matemáticas de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Medellín.

    La tomografía odontológica es una de las herramientas más utilizadas para complementar el examen odontológico clínico, ya que permite ver el interior de las piezas, el estado de las encías y los aspectos endodónticos, y además es muy útil en implantología porque provee imágenes planas de un órgano tridimensional.

    A diferencia de los programas estándar de visualización odontológica, Maxila muestra las piezas de interés en tres dimensiones (3D) sin ninguna deformación y respetando las formas y los tamaños originales del paciente. Este aporte aumenta la precisión de los diagnósticos médicos y le daría al paciente mayor participación en las decisiones sobre sus tratamientos.

    La herramienta diseñada, co-investigada con la postdoctora Cindy González, ofrece fotos internas; videos que se pueden desplegar en cualquier dispositivo (usualmente, para el despliegue se utiliza VLC, es un software libre); impresión 3D de las fotos internas que el paciente le puede mostrar al odontólogo (promoviendo una interacción más informada), y una app que permite interactuar con las fotos internas en 3D.

    El profesor Marco Paluszny Kluczynsky, de la Escuela de Matemáticas de la UNAL Sede Medellín y líder del proyecto adscrito al Grupo de Investigación Computación Científica, afirma que “buscamos proveerles a los pacientes de una herramienta gratuita e intuitiva que les permita entender fácilmente su situación bucal”.

    “Esta trabaja con la información de una tomografía común, que suelen realizarse antes de intervenciones complejas como implantes, tratamientos de conducto o cirugías maxilofaciales”, agrega.

    Señala también que “con esta innovación queremos impactar especialmente en las personas jóvenes, que cada vez están más interesadas en los aportes científicos del siglo XXI y en la medicina personalizada. Ellos entienden muy bien que la responsabilidad de la salud es propia”.

    Matemáticas y tercera dimensión

    El resultado de una tomografía suele ser una secuencia de imágenes planas; solo en algunos casos los médicos cuentan con softwares especializados para hacer observaciones en 3D o por capas.

    El investigador señala que, “lo que nosotros hacemos con la herramienta es permitir una visualización de la pieza dental ‘cortada’. Por ejemplo, tenemos un solo diente y diferentes fotos de alrededor y el interior de este. Esas imágenes pueden imprimirse en 3D u observarse como una animación en celular, tableta o computador”.

    Esto lo logran mediante técnicas geométricas –con cálculos matemáticos garantizan que la imagen no se deforme– y de computación gráfica –con programas como Unity– para llevar todo a formatos interactivos que el paciente y el médico puedan mover con un mouse o acciones táctiles, permitiendo zoom y rotación para cambiar el punto de vista.

    “Los softwares para visualizar datos en 3D suelen ser costosos y requieren muchas horas de entrenamiento. Con esta herramienta queremos democratizar el acceso a la información y a programas similares”, anota el docente.

    El objetivo de los investigadores es fortalecer la relación paciente-médico y proveerle al primero información clara y veraz para tomar decisiones sobre sus procedimientos.

    “Por su formación como anatomista, el médico entiende las imágenes, pero con la herramienta podrá explicarle con mayor claridad al paciente lo que tiene y lo que debe hacerle en el interior del maxilar. Ahí ya habría una relación más directa, personalizada”, anota.

    Además de emplearse en odontología, la tecnología se podría aplicar en el diagnóstico de enfermedades del aparato circulatorio (angiología).

    El académico destaca que “además de morfología dental podríamos hablar de morfología de un aneurisma o del manguito rotador. Así mismo podemos trabajar con tomografías, resonancias magnéticas y ecografías. Esta tecnología nos permite recoger y manejar información que no está estructurada en forma rectangular. Podemos desplegar cualquier órgano y el sitio exacto de la afección en 3D”.

    En la actualidad los investigadores buscan personas que deseen proporcionar los resultados de sus tomografías dentales u otras para pasarlas por Maxila, que en 2021 recibió patente de la Superintendencia de Industria y Comercio. Quien lo desee puede comunicarse con los investigadores en este correo: mpalusznyk@unal.edu.co.