El Corredor de Conservación que integra los Parques Nacionales Naturales de Chingaza y Sumapaz, la Reserva Forestal Protectora del Bosque Oriental de Bogotá y el Páramo de Guerrero es una propuesta liderada por la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá y Conservación Internacional.
El área comprendida entre los parques de Chingaza"Sumapaz y el Páramo de Guerrero tiene una superficie total de 1.700 hectáreas, aproximadamente, y abarca cerca del 20% de la población colombiana.
El aumento de la población de Bogotá y algunos municipios aledaños genera un fuerte incremento en la demanda de servicios ecosistémicos, entre ellos el agua y los cambios de uso de suelo, asociados a la ocupación humana, crean una disminución en la oferta de estos.
Patricia Bejarano, bióloga de la Universidad Nacional de Colombia, habló en Jueves de la Biodiversidad sobre el concepto de corredor de conservación, su importancia y lo que se espera con esta iniciativa en la que participan, entre otras entidades, la Alcaldía Mayor de Bogotá, Bogotá Positiva, el Ministerio del Medio Ambiente, Parques Nacionales de Colombia, la Secretaría Distrital de Ambiente y las gobernaciones del Meta y Cundinamarca.
"En este corredor se propone armonizar el uso del territorio y sus recursos naturales, realizando acciones de protección de las áreas de mayor importancia biológica que garanticen el suministro de agua y la restauración de zonas degradadas", indicó Bejarano, quien también es magíster en ciencias biología"línea ecología de la Universidad.
Este corredor es muy importante en la medida en que en él se encuentran representados ecosistemas de páramos y bosques andinos, considerados principales núcleos de diversidad con condiciones naturales importantes para el suministro hídrico y la protección de los suelos.
Con el proyecto se espera, además, impulsar la implementación, coordinación institucional y articulación entre autoridades ambientales y territoriales para aportar a los procesos de mitigación del cambio climático (actividades de reforestación, restauración, reducción de emisiones de gases) en los cuales se han empeñado estos actores.
"Este corredor nos permitirá trabajar en el ordenamiento del territorio, recuperar espacios degradados y restaurar buenas prácticas en el uso de la tierra", enfatizó la experta, quien se desempeña como coordinadora de Planificación y Uso del Suelo en Conservación Internacional Colombia.
Veinte municipios participan en la iniciativa: Bogotá, Cogüa, Choachí, Chocontá, Chipaque, Fómeque, Gachancipá, Guasca, Guatavita, Junín, La Calera, Nemocón, San Juanito, Sesquilé, Sopó, Tausa, Tocancipá, Ubaque, Une y Zipaquirá.