Escudo de la República de Colombia Escudo de la República de Colombia
/Rayos gamma detectan posibles daños en metales
Ciencia y Tecnología

Rayos gamma detectan posibles daños en metales

  • Equipo de detección que usa rayos gamma y las imágenes que registra. Fotos: Ricardo González

  • Elementos que componen el equipo de detección.

  • El profesor Cristancho explica las curvas con o sin posibles señales de algún daño.

  • Las curvas muestran irregularidades en las placas de metal.

  • Con los equipos también se generan imágenes de los metales registrados.

  • Esta es una gráfica del montaje del detector de rayos gamma.

Hasta el momento, se han hecho pruebas con hierro, cobre, aluminio y plomo, a través de fuentes de emisión de rayos gamma en un dispositivo de origen europeo, modificado y mejorado por investigadores de la U.N.

Esta es la potencialidad vista en los trabajos de investigación del Grupo de Física Nuclear de la U.N. Según su director, profesor Fernando Cristancho, se trata de un método para diagnosticar daños en metales usados en puentes, oleoductos, tuberías para agua, entre otros.  

En estos casos, uno de los efectos más comunes es la corrosión, un proceso de destrucción de metales y aleaciones provocado por acción química o electroquímica. El origen del daño se da por cualquier líquido, como el agua de mar, el agua dulce o el petróleo que pasa por los oleoductos.

"Una forma de corrosión es la presencia de pequeños agujeros, de tamaños inferiores a un milímetro y que al ojo humano no pueden verse", afirma el académico, quien agrega que el metal puede volverse quebradizo.

Así, aparecen modificaciones en la estructura, la resistencia térmica y eléctrica, el grosor y la densidad del material.

Existen otros métodos de detección, como el ultrasonido, similar a las ecografías, pero con objetos metálicos, y los rayos X. Sin embargo, para que estos funcionen, se necesita que el emisor y detector de la fuente estén en extremos.

También se encuentran los rayos gamma, un tipo de radiación electromagnética que, en comparación con los rayos alfa y beta, puede penetrar de forma más profunda la materia y sirve para esterilizar equipos y alimentos.

Para su uso, tanto emisores como detectores pueden ubicarse en un mismo lado. La fuente usada es un pequeño punto de un milímetro de radio, que condensa un material radiactivo, por ejemplo el cobalto.

Como detectores, amplía el docente e investigador, se pueden tomar cristales de germanio o yoduro de sodio. Para intervenir el metal, es necesario un proceso de espectroscopia que permita mirar cuánta radiación hay a niveles de onda.   

Gracias a un software desarrollado por el Grupo de Física Nuclear, se recrean las imágenes de las placas de metal y las gráficas de curvas que miden los daños en las muestras. "La curva muestra los cambios para definir si hay variación de grosor o densidad", señala el docente Fernando Cristancho, del Departamento de Física de la U.N.

Para los ejercicios, se evaluaron placas sin daño aparente y otras que fueron corroídas artificialmente por los investigadores, mediante un taladro. La proyección de esta iniciativa, apoyada por Colciencias, es usar muestras con corrosión cuantificada.