Primera ruta de avistamiento de aves para personas con discapacidad visual está en los Farallones de Cali
Cada año, unas 500 personas nacionales y foráneas llegan al país para disfrutar de esta primera ruta de avistamiento de aves incluyente, una iniciativa del zootecnista Carlos Mario Wagner, experto en aves de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira. Esta surgió en 2021 como resultado de una convocatoria realizada por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) para impulsar proyectos turísticos innovadores después del Covid-19.
El experto en aves, integrante del Grupo de Investigación en Diversidad Biológica de la UNAL Sede Palmira, afirma que “hemos logrado un impacto positivo en la economía local y en la conservación de los ecosistemas, debido en gran parte a que se han involucrado a las comunidades rurales en la protección de la biodiversidad, lo que ha permitido que varias fincas privadas se unan al esfuerzo y se establezcan como puntos de avistamiento”.
Destaca además que “muchos de mis vecinos no entendían por qué dedicaba tanto tiempo a observar aves, pero poco a poco se dieron cuenta del potencial que tiene esta actividad. Al conservar las aves también estamos protegiendo otros grupos taxonómicos como orquídeas, insectos y anfibios”.
Con más de 1.966 especies registradas, de las cuales alrededor de 275 son migratorias, Colombia se consolida como el país con mayor diversidad de aves en el mundo. El Valle del Cauca destaca con 989 especies, de las cuales 562 son de Cali, es decir más del 50 %, lo que convierte a esta región en un verdadero santuario para los amantes de la naturaleza y el turismo de observación de aves, una actividad conocida como aviturismo que ha surgido como una de las estrategias más efectivas ante la necesidad de conservar este patrimonio natural.
Este segmento atrae a cerca de 3.000 aficionados al año en el área de influencia de los Farallones de Cali, sobre la cuenca alta y media del río Cali, en los bosques de San Antonio ubicados en el kilómetro 18.
Desde su infancia, el zootecnista Wagner empezó a realizar observaciones y registros fotográficos que con el tiempo recopiló y se convirtieron en un esfuerzo colectivo para conservar los hábitats de estas aves, por lo que en 2004 el lugar fue declarado como Área de Importancia para la Conservación de las Aves (AICA). Estos sitios se identifican a partir de los criterios de expertos ornitólogos y conservacionistas del mundo, pese a que no se trata de una figura de conservación oficial.
La ruta turística diseñada por él y su esposa, Adriana Márquez, se materializó con el aporte de Juan Pablo Culasso, un invidente uruguayo célebre por su capacidad de distinguir los trinos de más de 3.000 aves.
El proyecto consiste en 400 m de sendero, que a lo largo del trayecto cuenta con 6 puntos en donde se ubican guías especializados y rutas seguras que les permiten a las personas con discapacidad visual disfrutar de la observación de aves mediante la experiencia sensorial de los sonidos y el entorno natural. El éxito del proyecto en Cali llevó a que la ruta se expandiera a comunidades indígenas en la Amazonia y campesinas en los Llanos y el norte del país.
Además de su valor intrínseco, las aves desempeñan un papel fundamental en el equilibrio de los ecosistemas como polinizadores, controladores de plagas y dispersores de semillas. Sin embargo, la fragmentación del hábitat, la minería y el crecimiento de cultivos de uso ilícito siguen amenazado su existencia.
Por eso el Grupo de Investigación en Diversidad Biológica de la UNAL Sede Palmira estudiará la diversidad genética de las aves de los Farallones de Cali y de la Reserva Forestal Natural Bosque de Yotoco.
Según informa el profesor Jaime Eduardo Muñoz Flórez, coordinador del grupo, “los estudios se adelantarán mediante técnicas moleculares y morfológicas, de donde esperamos que salga un inventario más extenso de las principales especies que habitan en esta región, el cual se convertirá en un libro e involucrará a las comunidades locales en la capacitación, conservación y el cuidado del entorno”.
La experiencia y el valioso aporte realizado por el zootecnista Wagner se dará a conocer como parte de la programación que prepara la Institución para la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad (COP16), que se celebrará del 21 de octubre al 1 de noviembre de 2024 en Cali.