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Educación

Primera cátedra UNAL sobre derechos campesinos reunió a más de 300 colombianos

    A propósito del acto legislativo con el que este año el Congreso de la República reconoció al campesinado como sujeto de especial protección constitucional, la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira ofreció la Cátedra Nacional “Percepción de los derechos campesinos desde la agroecología”, un espacio de reflexión y diálogo en el que académicos, estudiantes, campesinos y representantes de instituciones gubernamentales abordaron la importancia de esta decisión en la construcción de paz.

    El espacio, liderado por el Centro de Pensamiento y el Grupo de Investigación en Agroecología, surgió como respuesta a la necesidad de respaldar desde la academia el proceso de construcción de paz, entendiendo que la divulgación y las discusiones sobre los derechos campesinos son esenciales para fortalecer la convivencia y promover la justicia social.

    En tal sentido, el balance entregado al cierre de la Cátedra por la profesora Marina Sánchez, coordinadora del Centro de Pensamiento en Agroecología de la UNAL Sede Palmira, es positivo. “Generamos espacios de discusión académica desde lo local, nacional e internacional; intercambiamos saberes sobre los derechos humanos de los campesinos; visibilizamos los procesos del mundo y locales; y enriquecimos la dinámica curricular promoviendo el pensamiento agroecológico y sus profundas implicaciones biológicas, económicas, sociales y ambientales con la comunidad”.

    A partir de los contenidos explorados en cada clase, se discutió la relación del campesinado con la tierra, con la producción de alimentos, la soberanía alimentaria y sus formas de territorialidad campesina.

    Con la participación de 87 estudiantes de pregrado, maestría y doctorado de los diferentes programas de la UNAL, líderes campesinos y comunidad rural, la Cátedra se convirtió en un espacio de convergencia interdisciplinario en el que participaron personas de 16 departamentos del país, y además se sumó la colaboración de organizaciones como la Sociedad Científica Latinoamericana de Agroecología (Socla) y la Red de Mercados Agroecológicos Campesinos del Valle de Cauca (Redmac).

    La metodología incluyó la participación de 30 ponentes nacionales e internacionales, conversatorios sobre derechos campesinos y los entregables y trabajos finales en los que los estudiantes abordaron diversas temáticas.

    El derecho a la tierra, una de las preocupaciones

    Uno de los grupos conformados durante la Cátedra estuvo integrado por estudiantes de Administración de Empresas e Ingeniería Agroindustrial, quienes se centraron en el derecho a la tierra, para lo cual entrevistaron a los campesinos de la zona rural de Palmira (Valle del Cauca), en especial en comunidades organizadas, para analizar el impacto de la “organización” en este grupo social.

    “Ejercer el derecho a la tierra ha sido bastante complejo para los campesinos en zonas rurales”, manifestó la estudiante María de los Ángeles Álvarez, quien explicó que “nos concentramos en esta temática por que sentimos que fue el derecho que más impactó sobre lo que pensaron y por ser uno de los más vulnerados”. Como resultado final elaboraron un artículo de opinión para plasmar sus pensamientos al respecto.

    El estudiante Juan David Collazos considera que “en el ejercicio de la trazabilidad de los derechos campesinos en Colombia nos encontramos realmente atrasados. Observamos que la Constitución Política vela por los derechos de los campesinos, pero cuando vemos el panorama real en el campo, nos dimos cuenta de que la situación no ha avanzado mucho”.

    Según los jóvenes, se deben fortalecer las políticas que permitan materializar los derechos del campesinado, especialmente los que han sido y siguen siendo vulnerados por la guerra interna: “esta zona ha sido tradicionalmente afectada por el conflicto armado, por tanto, consideramos que las autoridades deben tomar medidas para que las comunidades campesinas puedan tener acceso a vías en buen estado e incentivar la productividad de sus tierras, pues no se puede competir en el mercado”.

    Revelaron además que “muchos de los campesinos entrevistados tienen familias cada vez más reducidas, en las que los jóvenes han decidido dejar el campo para buscar nuevas oportunidades y muchas familias han puesto en venta sus parcelas”.