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Salud

¿Por qué se necesita una Cátedra en Salud Mental, Inteligencia Emocional y Liderazgo?

    En Colombia, casi la mitad de los niños tienen indicios de algún trastorno mental como el déficit de atención e hiperactividad; los adolescentes experimentan ansiedad, fobia social y depresión, y una parte importante de los adultos presentan problemas afectivos. Violencia, desigualdad y conflicto armado, junto con la crisis provocada por la pandemia del COVID-19, han dejado cicatrices profundas en la sociedad. Para abordar las diferentes aristas de este fenómeno, la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) realizará la Cátedra en Salud Mental, Inteligencia Emocional y Liderazgo.

    Esta iniciativa busca generar un espacio que proporcione herramientas prácticas para despertar de la conciencia y el desarrollo personal y profesional de las personas inscritas, entre ellos más de 1.000 estudiantes de las nueve sedes de la Universidad, además de egresados y adultos mayores.

    El equipo multidisciplinario detrás de la Cátedra propone un proceso pedagógico que les permitirá a los participantes un autoconocimiento profundo, confrontar su ego y reconectar con su esencia para descubrir y capitalizar su potencial humano y espiritual, y vivir de manera más consciente.

    “Reconocemos los efectos negativos que la pandemia dejó en términos de salud mental en la población universitaria, por ejemplo”, indican. Los diferentes servicios de psicología de la Institución han evidenciado el aumento de patrones de conducta como estrés, ansiedad y soledad, los cuales requieren no solo atención urgente, sino también un ejercicio profundo de comprensión de la problemática y lo que está reflejando de la sociedad.

    La Cátedra no solo responde a una demanda social, sino que también se enmarca en iniciativas gubernamentales y en disposiciones legales que reconocen la importancia de abordar la salud mental en todos los ámbitos de la sociedad, como la Resolución 2646 de 2008 del Ministerio de Protección Social, la Resolución 2764 de 2022 y la Circular 64 de 2020, ambas del Ministerio del Trabajo.

    Para su coordinador, el profesor Juan Gabriel León Hernández, decano de la Facultad de Ingeniería y Administración de la UNAL Sede Palmira, “impartir pedagogía en salud mental e inteligencia emocional no debería ser solo un proceso académico aislado, sino enmarcarse en una estrategia nacional que sea implementada por todo tipo de instituciones públicas y privadas para el bienestar de todas las personas que tienen a su cargo”.

    Agrega que, “estamos acostumbrados a vivir en un modo automático en el que normalizamos el sufrimiento, bien sea en forma de estrés, ansiedad o de cualquier otro patrón de conducta. La información que intentamos ofrecer en esta pedagogía es para que nuestros estudiantes despierten en conciencia, se hagan reconocedores de sus bloqueos limitantes y los superen para liberar su máximo potencial”.

    A través de módulos semanales, la Cátedra abordará temas clave como el autoconocimiento y la desidentificación del ego; el dominio de la mente y la reconexión con la esencia; la gestión del estrés y la ansiedad; la génesis de las emociones y la meditación, entre otros.

    En el módulo de “Hábitos y resultados” los asistentes explorarán cómo funcionan las masas y cómo salir del sistema; cuál es la diferencia entre el orden y el adoctrinamiento, descifrando las fuentes de las creencias de cada uno.

    En “Sanación integral” los docentes tratarán el ciclo del abuso, cómo reconocerlo y salir de él, además del funcionamiento de la mente para su reprogramación. En “Propósito y liderazgo” aprenderán sobre el reconocimiento de su energía vital y cómo utilizarla a su favor para manifestar la vida plena que toda persona desea.

    La docente de la Cátedra, Diana Patricia Herazo, señala que “este espacio es propicio para un despertar de conciencia en el que los estudiantes pueden empezar a comprender esos patrones de conducta limitantes, superarlos y llevarlos a descubrir su verdadero potencial mental. A través de ello, reconocer que pueden ser los artífices personales e individuales de su paz interior, su felicidad, su éxito y su abundancia, sea cual sea el dominio en el que se desempeñen y la disciplina en la que se estén formando”.

    Por su parte el profesor Rubén Rendón, quien acompañará el desarrollo de la Cátedra, enfatiza en que “no entender nuestros propios patrones de comportamiento e ignorar nuestros vacíos, mientras responsabilizamos las condiciones externas de los motivos de nuestras reacciones y decisiones, es lo que nos conduce al drama humano, y en consecuencia al desarrollo de todos esos efectos negativos que pueden afectar la salud mental”.

    La Cátedra representa una oportunidad única para los estudiantes que deseen iniciar un proceso de autodescubrimiento y crecimiento personal. Con un enfoque práctico y basado en la evidencia, se espera que los participantes puedan aplicar los conocimientos adquiridos en todas las áreas de sus vidas, mejorando su bienestar y su desempeño tanto personal como profesional.