Escudo de la República de Colombia Escudo de la República de Colombia
/Partículas imperceptibles al ojo humano serían eficaces en encapsulación de medicamentos
Ciencia y Tecnología

Partículas imperceptibles al ojo humano serían eficaces en encapsulación de medicamentos

    Las cápsulas que suelen contener medicamentos, vitaminas o productos cosméticos se han diseñado de manera que la “capa” que las recubre prolongue el efecto del principio activo. En ensayos realizados con el copolímero de ácido láctico y glicólico (PLGA), cuyo uso está aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos, se evidenció que por debajo de los 250 nanómetros este conserva una eficacia de hasta 4 horas.

    Constantemente la industria farmacéutica busca mecanismos para que los principios activos de los medicamentos tengan un efecto prolongado, entre otras estrategias, ya que con esto se reducen algunos efectos secundarios, y se dan otros beneficios. En esa apuesta, ha encontrado en la nanotecnología un óptimo aliado.

    Existen muchos tipos de vehículos que transportan medicamentos, y su variedad depende de diversos factores, entre ellos los compuestos con los que son fabricados.

    La ingeniera química Paula Andrea Betes Sevillano, magíster en Ingeniería Química de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), diseñó partículas nanométricas (imperceptibles al ojo humano) con PLGA, un compuesto usado como matriz para la administración de medicamentos y para la regeneración ósea que no genera efectos adversos.

    Al romperse, dicho compuesto genera dos moléculas: el ácido láctico y el ácido glicólico, que el organismo metaboliza con facilidad cuando ha cumplido su ciclo.

    En su propuesta, la magíster utilizó e incorporó dentro de las partículas un colorante que simuló una sustancia grasa para ser liberado en medio oleoso. Así comprobó que su liberación en las primeras 4 horas fue rápida y luego se estabilizó.

    “En la mayoría de los estudios adelantados se han liberado en medios acuosos como agua, sangre y fluidos corporales, pero no se habían realizado liberaciones en aceites o sustancias similares, lo cual necesario porque nuestro cuerpo tiene tejido graso en un alto porcentaje y diversas aplicaciones en este tipo de medio”, señala la magíster.

    Eficaz en laboratorio

    En el ensayo para determinar la capacidad de liberación de PLGA se conformaron partículas con productos solventes –como acetona, dimetilsulfóxido, dioxano y diclorometano– y no solventes como agua, etanol y propilenglicol. Además se usó el copolímero con dos pesos moleculares diferentes: 7-17 kilodalton (kDa) y 38-54 kDa.

    “Luego, mediante nanoprecipitación se fabrican las partículas. Ahí medimos el tamaño y después de aplicar centrifugación las partículas se separan y aglomeran en el fondo”, explica.

    La preparación que obtuvo mejor liberación fue en la que se incorporó agua y dimetilsulfóxido en ambos pesos moleculares. También se identificó que el incremento en el peso molecular aumenta la distribución de tamaño de partícula y la eficiencia de encapsulamiento.

    Un tamaño inferior a los 250 nanómetros es positivo porque –según lo reportado en la literatura– cuando este se supera el organismo lo reconoce como algo extraño y lo ataca.

    Junto con estos ensayos se realizaron microscopías para observar y determinar la morfología de las partículas, su tamaño y perfil, y luego, con los datos arrojados se hicieron análisis estadísticos para determinar finalmente su comportamiento.

    “Con estos datos se pueden mejorar algunos componentes para que en esas primeras 4 horas el material no se libere tan rápido y que el principio activo permanezca por más tiempo”, especifica la experta.

    Los resultados de estos ensayos sirven para evaluar las propiedades y el comportamiento de las partículas, elementos necesarios para validar a futuro su posible aplicación en la industria cosmética y farmacológica.