Metodología BIM reduciría hasta una tercera parte de los costos de la construcción
Maqueta, taller proyectos 3 estructuras formales. Fotos: Natalia López Arboleda, Unimedios Manizales.
Estudiantes del Semillero BIM y Sostenibilidad.
Maqueta, taller proyectos 3 estructuras formales.
María Alejandra Herrera Hurtado, docente UNAL Sede Manizales, coordinadora del Diplomado en Adopción e Implementación de la Metodología BIM en el Sector Público.
UNAL Sede Manizales, campus Arquitectura. Foto: archivo Unimedios.
Esta estrategia consiste en la metodología BIM, Building Information Modeling o Modelado de Información de Construcción, la cual presenta un enfoque innovador para la gestión de proyectos de construcción que utiliza entornos digitales tridimensionales para representar y gestionar toda la información relacionada con un edificio o una infraestructura.
A través de esta metodología colaborativa entre todos los actores, se crea un modelo digital detallado que integra datos sobre el diseño, los materiales, costos, tiempos de construcción y demás, permitiéndoles a todos los participantes del proyecto colaborar en tiempo real.
La arquitecta María Alejandra Herrera Hurtado, magíster en Medio Ambiente y Desarrollo y docente en la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Manizales, señala que BIM contribuye a la mejora, precisión y coordinación, facilita la detección temprana de conflictos e interferencias y optimiza los costos y plazos de los proyectos promoviendo una construcción más eficiente y sostenible.
La arquitecta Hurtado fue galardonada con el BIM Women Awards 2024, que celebra la contribución femenina en las áreas de construcción, arquitectura e ingeniería en América Latina. Además lidera la primera edición del Diplomado en Adopción e Implementación del BIM en el Sector Público.
“Gracias a la integración y comunicación entre las partes, la metodología BIM logra reducir el 33 % de los costos y el 50 % en plazos, un aumento del 20 % en productividad y una mejora significativa en la calidad de los proyectos”, sostiene la docente.
La metodología BIM ha evolucionado notablemente desde sus inicios. Desde los años 90 primaron los avances en software BIM que les permitieron a diseñadores y arquitectos crear planos digitales y modelos 3D facilitando la visualización y modificación de los diseños. Con el tiempo BIM se amplió para incluir la gestión de costos, los tiempos de construcción y el mantenimiento durante el ciclo de vida del edificio.
Más adelante se amplió y consolidó el concepto de BIM como una metodología de trabajo colaborativo que permite la gestión de la información del modelo constructivo y el OpenBIM para promover la interoperabilidad entre las plataformas y mejorar la colaboración entre profesionales.
Hoy se ha implementado el concepto “gemelo digital” (digital twin), que permite crear réplicas virtuales precisas para simular y optimizar el rendimiento de las estructuras en tiempo real, apoyando la sostenibilidad y la gestión eficiente de los recursos.
“En Colombia, la construcción ha seguido métodos tradicionales basados en planos 2D y documentación en papel, lo cual ha conducido a problemas significativos como información insuficiente en el 92 % de los proyectos, sobrecostos superiores al 10 % en el 90 % de los casos, y retrasos en el 95 % de los proyectos. Además, el 37 % de los materiales en la industria de la construcción terminan siendo desperdicio”, enfatiza la investigadora Herrera, quien se basa en el informe, el McKinsey Global Institute Analysis para Latinoamérica.
Ahora se busca transformar el sector con la implementación de la metodología BIM desde la academia, a través de proyectos de investigación y extensión en la UNAL Sede Manizales, en donde la docente ha creado el Semillero de Investigación BIM y Sostenibilidad.
La primera versión del diplomado impactó a 19 estudiantes, y para 2025 se prevé abrir la Especialización en BIM, que actualmente se encuentra en desarrollo. Su labor está marcando una diferencia notable en la formación académica en metodologías digitales para la modernización de la construcción, que es una de las rutas económicas más importantes para la prosperidad del país.
Estos proyectos tienen como objetivo formar a los nuevos arquitectos en Metodología BIM, promoviendo una revolución en la forma en que se gestionan y ejecutan los proyectos constructivos para ser más competitivos y productivos, mejorando así la eficiencia en el sector, con el fin de superar estas brechas de infraestructura que, según la OCDE, están frenando el crecimiento del país.
“Dado que pasamos más del 90 % de nuestras vidas dentro de edificaciones, la seguridad y calidad en la planificación del diseño y la construcción de estos espacios son cruciales para nuestro bienestar y confort”, destaca la arquitecta Herrera.