La U.N., primera en protección ambiental del país

Desde 2012, la U.N. ha ido ascendiendo progresivamente en este ranking que evalúa los trabajos realizados por las universidades para mitigar el impacto ambiental, hasta ubicarse en 2016 en el puesto 45 del mundo, en el tercer puesto de Latinoamérica y la única de esta medición en Colombia.

Según el profesor Herney Ramírez Franco, coordinador Nacional de Gestión Ambiental de la Universidad, este avance se ha caracterizado por los grandes esfuerzos que ha hecho la U.N. para fortalecer sus políticas ambientales.

El Green Metrics es un ranking que analiza los aportes de cada universidad al medioambiente, entre los que se observan las zonas verdes protegidas que tienen los campus. "En este caso, por ejemplo, las ocho sedes poseen enormes áreas verdes y es tarea de la Oficina de Gestión Ambiental proteger estos espacios", anota el docente Ramírez.

Además, la medición calcula el número de árboles por cada estudiante y los tipos de aves que se pueden ver en los espacios universitarios, entre otros aspectos ambientales.

Trabajo con las sedes

Esta medición les ha permitido a las sedes de la Universidad identificar las problemáticas que cada una tiene en materia ambiental. De acuerdo con el profesor, "nos hemos organizado de forma muy sistemática y clara en cada una de las sedes para asumir los retos".

En Palmira, Medellín y Manizales se ha venido trabajando con cada jefe de la Oficina de Gestión Ambiental en la identificación y corrección de problemáticas, observó.

Dentro de los proyectos más aplaudidos, el profesor destaca el de la U.N. Sede Caribe, donde se instalaron paneles solares para la producción y consumo de energía en el campus, uno de los proyectos de mejor acogida dentro del ranking.

Una de las problemáticas identificadas por la Oficina de Gestión Ambiental de Bogotá es la del vertimiento de aguas. En palabras del docente, el campus produce vertimientos relacionados con los barrios que la rodean, lo que quiere decir que es un alcantarillado común y por eso no se puede hacer una limpieza total, porque no es independiente.

"Para hacer las mediciones hemos identificado espacios en los que las tuberías están a dos o tres metros de profundidad, pero en algunas zonas del campus están enterrados a más de 10 metros y es imposible instalar cámaras de medición en estos puntos", afirmó el profesor.

Sin embargo la Universidad trabaja diariamente para mitigar el impacto de vertimientos de agua contaminada y hace la medición correspondiente.

Otro logro importante que destaca el coordinador de la Oficina Ambiental es el de la creación y el funcionamiento de los centros de acopio de residuos. "Tenemos centros de acopio de residuos químicos, peligrosos y de posconsumo, y queremos unificarlos todos en un solo espacio".