Juan Manuel Santos: “es satisfactorio ver a tantos jóvenes de la UNAL trabajar por el desarrollo del país”

Cómo conseguir que el corozo, fruto típico del Caribe colombiano, alcance la denominación de origen y probar la eficacia de algunas bacterias del río Cesar para que la producción agrícola pueda ser más eficiente, fueron algunas de las investigaciones destacadas por el exmandatario durante su visita a la UNAL Sede de La Paz, donde participó como invitado especial al conversatorio “La paz: Camino y destino”.

Resaltó el trabajo que viene realizando la UNAL por el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación en los territorios afectados por el conflicto, pero también por la reconciliación a través de un intenso trabajo con las comunidades.

“Eso es construir paz, eso es construir futuro, y por eso, en este día me siento muy contento, no solo porque inicio mi experiencia como docente de la Universidad, sino también por ver cómo esas semillas que sembramos están comenzando a florecer en los jóvenes que trabajan apasionadamente para contribuir al desarrollo de la región”.

El diálogo es el arma más poderosa para hacer la paz, las víctimas y la verdad son esenciales en un proceso de paz si se quiere alcanzar la reconciliación, prepararse muy bien para la negociación, fueron algunas de las experiencias que compartió el Nobel de Paz con los expectantes asistentes, quienes hicieron caso omiso del sofocante calor vespertino de La Paz.

También hizo alusión a una lección que aprendió a las malas: la importancia de la pedagogía y la comunicación “todo proceso de paz y casi que todo proceso de transformación así lo exige, pues el ser humano por naturaleza rechaza los cambios y solo comienza a aceptarlos cuando empieza a comprenderlos”.

En el conversatorio participaron los docentes Alejo Vargas, Ricardo Peñaranda y Rodrigo Uprimny, del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales (Iepri) de la UNAL, quienes, junto con el Instituto de Liderazgo Público de la Insttución, fueron los encargados de su organización.

La bienvenida estuvo a cargo de la profesora Marcela Camacho, vicerrectora de la UNAL Sede de La Paz, y las palabras de recibimiento las ofreció la profesora Dolly Montoya Castaño, rectora de la UNAL.

La Rectora dijo que “la UNAL es la Universidad que lucha por la paz, y es importante llevar esta paz de los escritorios a los territorios, de manera viva, activa, solidaria y sostenible”.

Por su parte, la vicerrectora Camacho señaló que esta visita es trascendental para este territorio que forma parte del Plan de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), históricamente golpeado por la guerra, en donde 1 de cada 3 estudiantes, de los 1.320 que hay, es víctima conocida del conflicto armado.

Lecciones de paz

Con respecto a la importancia del contexto internacional sobre el proceso de paz, el Nobel respondió: “cuando firmamos el Acuerdo de Paz, el entonces presidente de Afganistán me abordó en Naciones Unidas y hablamos acerca de la importancia de que los países vecinos apoyaran procesos como el que se estaba llevando en ese país, de lo contrario es muy difícil lograr la paz”.

Agregó que “en la región fue determinante tejer relaciones con países vecinos con los que se tenía una relación difícil –como Venezuela, Ecuador o Brasil– para lograr la paz”.

Destacó además que nunca antes en un proceso de paz las Naciones Unidas habían aprobado tantas resoluciones unánimes a favor de algún evento de este tipo en el mundo, lo cual evidencia la importancia internacional que tuvo el Acuerdo.

Con respecto a las lecciones del proceso de paz con las FARC y los retos que todavía tiene la implementación del Acuerdo, el profesor Santos manifestó que “el gobierno saliente dañó logros que se habían conseguido; por ejemplo, en el tema de la protesta social, en mi gobierno había un comité solo para estas situaciones, en donde se hacían reuniones para evaluar las manifestaciones en el país, y se enviaba a algún funcionario a resolver el problema, teniendo como eje una política preventiva; sin embargo, en el anterior gobierno se utilizaron estas estrategias para identificar y judicializar a los líderes de las protestas, teniendo una política represiva contra la protesta estudiantil”.

Otro ejemplo que utilizó para mostrar la falta de compromiso del gobierno anterior es el de la minga indígena que vino del Cauca a la Plaza de Bolívar y no fue recibida por el entonces presidente Iván Duque.

En relación con el triunfo del NO en el plebiscito, el profesor Santos dijo que no volvería a acudir a este instrumento porque aprendió la lección, pero no se arrepiente, “estaba cumpliendo con una promesa con el pueblo colombiano, mucha gente me dijo que no lo hiciera, incluso las FARC, pero la cuestión es que yo no pensé iba a ganar el NO”.

“Todos los procesos de paz son impopulares, pero en la medida que se comprende que es mejor la paz, aunque imperfecta, los procesos tienen más respaldo”, dijo.

Durante su visita a la Sede de La Paz, el Nobel compartió con los jóvenes estudiantes, quienes efusivamente buscaban tomarse una foto y hablar con él; también saludó a los docentes que se encontraban en ese momento haciendo sus tareas en los distintos laboratorios de ciencias.