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Desarrollo Rural

Identifican siete especies de garrapatas en Arauca

  • Las garrapatas pueden durar de 2 a 9 años en el medio sin alimentarse.

  • En Arauca se confirmó la presencia de siete especies de garrapatas.

  • Esta es la primera investigación de este tipo, que abarca los siete municipios de Arauca.

  • Se recomienda que las entidades públicas y el gobierno local tengan en cuenta la problemática, una limitante para la producción bovina.

  • Arlex Rodríguez Durán, magíster en Salud Animal de la Facultad de Medicina Veterinaria y de Zootecnia de la UNAL.

Mediante el estudio y la caracterización de 57.021 artrópodos en 63 fincas de los siete municipios de este departamento, se confirmó la presencia de esta cantidad de especies, que corresponden a los géneros Amblyomma y Rhipicephalus.

Las garrapatas son una limitante en los sistemas de producción bovina del trópico, ya que causan estados patológicos, transmiten organismos patógenos y generan pérdidas económicas.

La prevalencia más alta de estas especies fue para R. microplus (96,5 %), seguida por A. cajennense s.l. (2,4 %), Amblyomma spp. (0,5 %), A. mixtum (0,2 %), Rhipicephalus spp. (0,1 %), A. dissimile (0,0020 %) y R. sanguineus (0,0020 %).

Así lo muestra la investigación de Arlex Rodríguez Durán, magíster en Salud Animal y miembro del Grupo de Investigación en Parasitología Veterinaria de la Facultad de Medicina Veterinaria y de Zootecnia de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL).

El estudio buscaba caracterizar las especies de garrapatas que infestan al ganado bovino, su prevalencia, la transmisión de Rickettsia spp. "bacteria transmitida por la garrapata", la resistencia a acaricidas, los factores de riesgo y los métodos de control aplicables.

Se examinaron 694 bovinos en 63 fincas distribuidas en las dos subregiones del departamento "piedemonte llanero y sabana inundable", donde la prevalencia de las garrapatas fue del 93,3 % para los bovinos y del 100 % para las fincas estudiadas.

El investigador realizó una identificación taxonómica y otra a través de la identificación de la garrapata Rhipicephalus, mediante pruebas moleculares, como la PCR, y logró determinar la presencia específica de este ectoparásito.

La investigación arrojó que la incidencia de las enfermedades provocadas por los microorganismos patógenos transmitidos por las garrapatas está aumentando en diferentes países debido tanto a los cambios y la variabilidad climática como a los escenarios de globalización, lo cual representa amenazas para la salud pública y animal en todo el mundo.

Según el DANE (2016), en Arauca la producción ganadera es la actividad económica de mayor presencia en las zonas rurales, con un aporte al producto interno bruto (PIB) del 17 % y un inventario bovino de 1.162.032 cabezas.

El Instituto Colombiano de Agricultura (ICA) menciona que Arauca tiene el 4,4 % de la población bovina de todo el país y ocupa el lugar 12 con mayor número animales en Colombia; las razas mestizas y el cebú comercial son las de mayor presencia en el departamento.

Pérdidas económicas y afectación animal

Las pérdidas económicas son ocasionadas por los efectos directos, pues la extracción de sangre por ciclo de la garrapata alcanza hasta 15 microlitros de sangre en promedio; esta pérdida lleva a la reducción de peso del bovino vivo, en su apetito, reduce los glóbulos rojos, causa depresión de la función inmune, desequilibrio en la frecuencia respiratoria, estrés e irritación general en el hospedador.

Además tiene efectos indirectos como vectores de enfermedades "que reducen la tasa de crecimiento"; problemas de fertilidad; disminución de la producción de leche y carne: depreciación del valor de las pieles "entre 20 y 30 %"; y heridas abiertas que conducen a infecciones secundarias.

La investigación también identificó una alta resistencia por parte de los artrópodos, la cual se debería a factores como no usar receta médica o control por parte de un profesional, mala nutrición, causada por los mismos productores (que propicia la presencia de más garrapatas), y carencia de una rotación de productos para el control, entre otros.

La investigación evidencia que el 85,1 % de los productores emplean el control químico como único método, dejando de lado el uso de alternativas biológicas, por medio de las cuales se pueden implementar algunos tipos de plantas que harían que las garrapatas rompan su ciclo.

"Cada finca es particular y se le debe realizar un control estratégico según sus condiciones tipológicas, lo que lleva a una terapia o un manejo diferente para cada una, desde su individualidad cultural y ambiental", sostiene el investigador.

Este proyecto de investigación, que se desarrolló con el apoyo de la Universidad de Antioquia, en el marco del Proyecto Bovino Arauca, fue aprobado con recursos del Sistema Nacional de Regalías y la Gobernación del departamento.