Gestores culturales empíricos construyen paz y memoria en el Cesar

Un documental producido por la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) analiza los modelos de gestión cultural empírica adelantados por 6 personajes de Manaure, Pueblo Bello, San Diego, Agustín Codazzi, La Paz y Valledupar, municipios del norte del Cesar en donde son comunes los músicos que tocan un sinfín de instrumentos, además de escritores, reporteros gráficos, bailarines, coleccionistas y cantantes, entre muchas otras habilidades artísticas, quienes ejercen el rol de agentes transformadores y buscan activamente propuestas que fortalezcan el ser social.

Marco Guevara, fotógrafo del Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (ETCR) Tierra Grata; Rodrigo Vega, coleccionista de objetos antiguos; Yolaida Padilla, escritora; Wilman Zining, maestro de danzas; Carlos Ariño, guacharaquero, y Elvis Montero, líder en procesos de danza, teatro y música, participaron en este trabajo investigativo liderado por Josimar Darío Roa Marriaga, magíster en Gestión Cultural de la UNAL y docente ocasional de la Sede de La Paz, quien propone implementar modelos de gestión cultural empírica voluntaria, de autogestión, estratégico/comunitario, de participación y cooperativa e hibrida.

Algunas historias

Después de la firma del Acuerdo de Paz, el fotógrafo Guevara empezó a documentar el tránsito de una comunidad que llegó con armas al territorio y que se ha ido transformando a la reincorporación. Esa fue su escuela de formación autodidacta a través de un proceso comunitario.

Por su parte el coleccionista Vega tuvo su primer acercamiento con la gestión cultural cuando organizó las pertenencias de su fallecido padre y encontró una colección de monedas, billetes y otros artículos antiguos que reposaban en su finca. “Valoré cada elemento hallado, y desde ese preciso instante decidí continuar la colección que, con el paso del tiempo, convertiría mi hogar en un espacio de memoria, enriquecido con aportes de otras personalidades del pueblo”, comenta.

Así mismo, en una entrevista la escritora Padilla dejó entrever que la sensibilidad de su padre hacia la música, y especialmente a las letras de las canciones que escuchaba, la indujo a ese amor por lo bello, lo especial, lo estético, la naturaleza y el amor como epicentro de la inspiración. Poco a poco esos sentimientos la adentraron en el mundo de la poesía y escribió los primeros versos dedicados a su madre que se recitaban en las escuelas de la época.

¿Qué dice el autor?

“Este trabajo se convirtió en un compromiso artístico, profesional y principalmente moral porque se plantean los procesos de personas que merecen ser escuchadas, vistas y tenidas en cuenta; merecen ser visibilizadas y conocer cómo se enfrentan día a día a las adversidades sociales desde sus roles”.

“Además se consolidaron interesantes diálogos que evidenciaron las múltiples posibilidades de trabajar la cultura en los territorios. Los gestores culturales empíricos que participaron en el proyecto reflexionaron a partir de su vida y de la experiencia en el campo de la gestión, lo que construyó un vínculo que permitió un desahogo y un oxígeno de aliento a la complejidad de hacer labores con minúsculo apoyo”, sostiene el magíster Roa.

Señala además que “cada uno de los personajes adelanta la gestión cultural de forma diferente, a partir de sus posibilidades y del contexto en el que se desenvuelven, y aunque todos la ejercen desde la necesidad de sus territorios, cada uno desarrolla proyectos diferentes, pero centrados en una característica principal, que es la consolidación de trabajos sociales a través del arte y la cultura”.

“El ejercicio de los gestores se enmarca en brindarle diferentes herramientas a la población, en darles la posibilidad de escoger qué es lo que quieren para su futuro y empoderarlos desde la parte social hasta la persona, ya que la gestión cultural es transversal a cualquier ciencia o disciplina.

Propuestas

Los planes del magíster son continuar aportando a la visibilidad de esta labor tanto en el Cesar como en otros departamentos del Caribe colombiano, por lo que aspira a extender este proyecto hasta conocer y reconocer cuáles serían los modelos de gestión cultural empírica que se implementan en el país.

Para continuar con este proyecto es necesario crear una base de datos y caracterizar a los gestores culturales empíricos delimitados por zonas geográficas. También se busca diseñar e implementar un libro en el que reposen los diferentes relatos de vida de los gestores culturales empíricos y todo lo concerniente a la gestión cultural.

Acá puede ver el documental completo: https://drive.google.com/file/d/1QnqO1E2T11_sSIc3hHwWJ0DdSqmgnoHe/view