Fotogalería. Custodia del patrimonio en el Archivo Central e Histórico de la UNAL
Con 80 años a cuestas, el compromiso del Archivo Central e Histórico sigue siendo el de conservar y custodiar los valiosos documentos que ha producido la Universidad Nacional a lo largo de su historia. (Fotos: Nicol Torres-Unimedios)
El Archivo custodia cintas de 16 y 35 milímetros, que contienen documentales de Cine y Televisión de la Facultad de Artes.
Entre las colecciones que resguarda se encuentran joyas históricas en diversos formatos, como fotografías, películas, mapas, libros antiguos y objetos de valor.
Custodia más de 20.000 diapositivas que contienen en su mayoría fotografías y planos de edificios.
Fotografías de Manuel Ancízar Basterra -primer rector de la UNAL- y su esposa Agripina Samper, técnica de impresión sobre porcelana.
El objetivo es seguir ampliando los servicios, especialmente en áreas como restauración y digitalización de documentos, para facilitar el acceso y la consulta de los materiales.
El Archivo ha experimentado un crecimiento significativo y ha construido una valiosa colección de documentos a lo largo de los años.
Este espacio es un recurso valioso para estudiantes, profesores e investigadores, quienes pueden realizar solicitudes de consulta a través de la página web o por correo electrónico.
Los documentos que se depuran se tienen que picar y meter en bolsas para ser reciclado.
El edificio que actualmente alberga el archivo tiene una interesante historia, siendo anteriormente utilizado como matadero y posteriormente adaptado para su función actual.
El Gran Fondo UNAL comprende una vasta colección que abarca desde las ciencias humanas hasta las sociales y técnicas, y se ha mantenido meticulosamente desde su creación hasta aproximadamente 2014. Los documentos anteriores a 1997 también forman parte de esta valiosa colección.
A partir de 1998 se ha establecido un inventario adecuado para todos los documentos, y los recibos de transferencias están organizados por dependencias. Además, se trabaja en la organización de los archivos de las diferentes facultades, algunos de los cuales ya han sido incorporados, mientras que otros se encuentran en proceso de inventario desde 1936.
La labor de organización y custodia se ha vuelto más compleja desde la promulgación de la Ley General de Archivos en 2000, lo que implica rendir cuentas también al Archivo General de la Nación. Sin embargo, la independencia del Archivo Central e Histórico de la UNAL se mantiene, y se aplican rigurosamente las normas técnicas para preservar adecuadamente los documentos.
El Gran Fondo Universidad Nacional no solo comprende documentos institucionales, sino también 43 colecciones de archivos pertenecientes a profesores fallecidos, quienes fueron fundamentales en el establecimiento de carreras y programas académicos.
Además, alberga los antecedentes de las antiguas universidades que precedieron a la UNAL, así como documentos de instituciones académicas externas que colaboraron con la Institución.
Este espacio no se limita solo a la preservación de documentos, sino que también facilita y apoya la labor de investigación tanto para la comunidad académica interna como para investigadores externos. A través de su página web, se brinda acceso y búsqueda fácil a la información.
En resumen, es un tesoro cultural y académico que ha sido cuidadosamente resguardado y organizado a lo largo del tiempo. Su relevancia y utilidad se extienden más allá de la universidad, ya que contribuye al avance del conocimiento en diversas áreas y permite que la memoria histórica se mantenga viva y accesible para las futuras generaciones. Su promoción y divulgación es esencial para su continuidad y enriquecimiento, y se deben considerar nuevas estrategias para atraer a un público más amplio hacia su riqueza documental.