En Meta y Puerto Carreño microrredes muestran su eficacia en la generación de energía

En Colombia, el abastecimiento de energía está asegurado gracias al Sistema Interconectado Nacional (SIN), que integra todas las líneas de transmisión de energía y subestaciones disponibles en el país permitiendo la interconexión de los sistemas eléctricos regionales y facilitando el transporte de la energía desde las centrales de generación hasta los pueblos y ciudades donde se consume.

Pese a dicha gestión, todavía hay territorios que tienen escasas vías de acceso a este servicio, o simplemente no lo tienen. Según reportes del Ministerio de Minas y Energía, en 11 municipios colombianos la prestación de energía eléctrica es inferior a 24 horas diarias.

El profesor Eduardo Mojica, de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), señala que “especialmente en el sur del país hay zonas que no están conectadas al sistema principal porque no hay líneas de transmisión y la única forma de crear energía es localmente, a través de paneles solares, eólicos u otro tipo de energías renovables”.

En las microrredes habría una respuesta

Así como el cerebro tiene redes neuronales que hacen posible el intercambio de información entre las neuronas, en la ingeniería eléctrica, también existen microrredes que hacen posible la integración y articulación entre los generadores distribuidos con las cargas eléctricas locales para sacar el mayor beneficio.

El libro Optimización y control en grafos plantea una mirada a la teoría de optimización y control distribuidos que ayuda a mejorar diferentes sistemas, entre ellos el energético.

El experto y autor del libro explica que “normalmente la optimización y el control es centralizado, es decir, es como si hubiera una agencia central que se encargara de todos los procesos y es por eso que se buscan alternativas que cambien ese modelo a uno en el cual interactúen múltiples agentes con el mismo fin, a eso se le llama ‘redes’, y por ejemplo en una red eléctrica los generadores y las cargas son las que desempeñan ese rol”.

Esa idea de redes en el libro, que recoge el resultado del curso de posgrado “Optimización y control en sistemas distribuidos en red”, se extrapoló a las matemáticas y a modelos que permiten entenderlas mejor.

Para ello se utilizaron “grafos”, unas estructuras matemáticas conformadas por un conjunto de nodos (también llamados vértices) que se conectan por líneas (o aristas), y con ellos se hizo la modelación de la conexión de los agentes o “microrredes eléctricas”.

Así, las microrredes eléctricas vienen siendo sistemas de distribución de energía eléctrica que operan de manera autónoma o conectados a la red principal, pero que también pueden funcionar independientemente en caso de fallos o interrupciones en la red principal. Además utilizan paneles solares, turbinas eólicas, generadores diésel y baterías de almacenamiento para generar, distribuir y suministrar energía eléctrica a los consumidores cercanos.

“El aporte a la descentralización en sistemas energéticos es algo que está empezando a ocurrir dentro de los sistemas de distribución, porque además disminuye el costo de generación de energía”, comenta el experto.

Este tipo de soluciones son especialmente útiles en zonas remotas o aisladas que no tienen acceso a la red principal, lo mismo que en áreas urbanas que se pueden beneficiar de una fuente de energía local y sostenible. Además, según indica el académico, “pueden ofrecer mayor seguridad energética”.

“En el Meta y Puerto Carreño ya hemos hecho pilotos de generación distribuida en casas con paneles solares, y esperamos en los próximos cinco años tener una integración completa”, concluye el experto.

Optimización y control en grafos reúne la teoría fundamental de optimización, la teoría de grafos, y cómo estas dos juntas constituyen la tan proclamada “optimización distribuida”, que es la optimización en redes.

Aquí puede adquirir el libro: https://www.libreriaunal.com/libro/optimizacion-y-control-en-grafos_39106