Empresas colombianas afrontarán cambio climático con apoyo de la U.N.

Tras la pasada conferencia sobre Cambio Climático (COP 21), realizada en París, Colombia prometió reducir para 2030 sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 20 %.  Aunque es una meta en la que todos los sectores de la sociedad deben aportar, el sector empresarial lo puede lograr de manera más significativa.

Por eso, explica el profesor Néstor Rojas, de la Facultad de Ingeniería de la U.N., se trata de iniciar un trabajo continuo junto con las empresas para obtener un diagnóstico y, a partir de la ciencia, construir planes de acción que les permita avanzar en su competitividad, pero reduciendo, a su vez, emisiones.

Con esta alianza, la U.N. persigue un diálogo permanente con las empresas para que estas puedan reducir emisiones a partir de acciones como la eficiencia energética, o explorar otras alternativas, entre ellas generar compensaciones a partir de la reforestación.

"Como cada industria es diferente, debe aplicar distintos elementos para mitigar su impacto ambiental. En ese sentido, estamos mostrando las posibilidades de apoyo académico de la Institución a estas organizaciones, para que salga una agenda con compromisos individuales y sectoriales, y así trabajar juntos por alcanzar los objetivos", afirmó el profesor José Ismael Peña, decano de la Facultad de Ingeniería de la U.N., durante el acto protocolario realizado por la Cámara de Comercio de Bogotá.

Entre las empresas que iniciarán este proceso se encuentran Codensa, Bridgeston, Pinturas Tito Pabón, Frigorífico Guadalupe, Laboratorios Chalver, la Federación Nacional de Cacaoteros (Fedecacao) y la Asociación de Bananeros de Colombia (Augura).

Para Gustavo Galvis, presidente de la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Públicos y Comunicaciones (Andesco), el aporte de la Universidad Nacional de Colombia es trascendental, pues apoyará a las empresas del país a sintonizarse con el lenguaje empresarial mundial: "firmas sostenibles en lo financiero, lo social y lo ambiental".

Mientras el mundo científico buscaba que los compromisos ayudaran a que el calentamiento no sobrepasara los 1.5 grados para los próximos años, la COP21 terminó con la aceptación de los dos grados.

Según cifras de la ciencia, dadas a conocer por Manuel Guzmán Hennessey, director de KLN, el tratamiento sobre cambio climático (cuyos efectos dejan 4,5 millones de víctimas por año) representa 1,6 puntos del PIB mundial, es decir 1,2 billones de dólares al año.

No obstante, si continúa el patrón con las emisiones actuales, la atención de catástrofes asociadas a fenómenos climáticos cada vez más frecuentes y, cada vez más extremos, comprometerán el 10 % del PIB mundial para 2050. A ello podrían sumarse guerras climáticas por tensiones migratorias, con 200 millones de refugiados climáticos para ese año, y muertes a gran escala por hambrunas y falta de agua.

KLN es una red abierta que reúne, entre organizaciones y personas, cerca de 700 actores de la región. Según su director, "la Universidad debe estar presente en los procesos de cambio empresarial y en los de responsabilidad de los empresarios frente a la crisis climática".