Esta fue la advertencia de Juan Camilo Cárdenas, de la Facultad de Economía de la Universidad de los Andes, en diálogo con la Agencia de Noticias de la UN y el canal de televisión en Internet de la UN, Prisma TV (http://www.prismatv.unal.edu.co/).
Cárdenas, doctor en economía ambiental y posdoctor en políticas públicas, afirmó además que de 114 millones de hectáreas de territorio continental colombiano casi la mitad corresponde a bosques que funcionan bajo esquemas de manejo y propiedad diferentes a la propiedad privada.
Agregó que el país tiene 30 millones de hectáreas (ha) de bosques ubicados en resguardos indígenas, 12 millones en parques nacionales y 6 millones en tierras colectivas de comunidades negras.
En este sentido, la diversidad de objetivos del uso del territorio es mucho mayor. En su libro, Dilemas de lo colectivo, el profesor cita tres tipos de usos de los bosques: los directos, los indirectos y los de valores de existencia. El primer uso se refiere exclusivamente a "los beneficios extractivos de los recursos; el segundo se refiere a los servicios ambientales del bosque como la sombra, la luz, la regulación de fuentes de agua, etc., y el último se refiere a la existencia misma del bosque por condiciones culturales y rituales".
Sin embargo, considera que estos usos generan dos tipos de dilemas en Colombia, en un territorio de bosques mayoritariamente de "acceso colectivo": el dilema local y el dilema global.
El dilema local corresponde a los diferentes tipos de intereses de un grupo para la extracción de los recursos directos, el provecho a mediano y largo plazo por los servicios ambientales o la conservación de las especies porque existen y valen para la sociedad. Para Cárdenas "el dilema está entre aprovechar y conservar".
El dilema global se refiere al reconocimiento de la integridad de los bosques, que afecta no sólo a las comunidades aledañas sino al país y al resto del planeta. De acuerdo con el investigador, habitantes de las zonas del pacífico, las zonas cafeteras o las zonas andinas le han manifestado su responsabilidad en la conservación del planeta contra la posibilidad de aprovecharlo solo para ellos. En este sentido, señala, "la gente tiene una conciencia de que esto también tiene un servicio para la humanidad".
Según el docente hay buena información científica y técnica sobre las calidades de los bosques, pero llama la atención porque "nos ha faltado volverla de uso público para que el ciudadano común y corriente se adueñe de la realidad de los mismos" y enfatiza que el Estado tiene una capacidad muy limitada para monitorearlos, por lo que propone que la sociedad civil se involucre mediante un sistema de alertas tempranas para que "la gente denuncie a través de su celular las infracciones que se cometan en los bosques, las minas y las cuencas".
Colciencias y la Universidad Nacional organizan el Foro Forestal Replantémonos, que se desarrollará el próximo 8 de septiembre en el Congreso de la República para que la sociedad civil debata a nivel público y nacional sobre el estado actual de los bosques y el futuro que queremos para ellos.
La entrevista completa está disponible en www.replantemonos.unal.edu.co, donde los interesados en asistir al debate también podrán hacer sus inscripciones.