Cundinamarca producirá papa criolla más nutritiva

Según los investigadores, esta apuesta de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) y la Universidad McGill de Canadá quiere llevarse a cabo en Cundinamarca, donde se ha diseñado una Política de Seguridad Alimentaria y Nutricional para reducir cifras de desnutrición. Asimismo, se pretende generar procesos educativos para mejorar la nutrición y calidad de vida en estas comunidades.

También, proponen crear nuevas metodologías para la promoción de Núcleos de Emprendedores Rurales y Escuelas de Formación para la Agricultura Familiar, explica a la Agencia de Noticias UN la profesora de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Sede Bogotá, Teresa Mosquera, una de las principales impulsoras de esta iniciativa junto con otros docentes de la Institución.

La investigadora destaca que se trata del único proyecto en Latinoamérica, en el que se hacen sinergias con otros proyectos que tiene la Universidad, como el corredor tecnológico, "para promover el consumo de estas papas, es decir impulsar una innovación generada a partir de conocimiento científico muy robusto, no solamente en las ciencias naturales sino también en las ciencias sociales".

En 2014, los investigadores presentaron las papas con mayor calidad nutricional y rendimiento, importante para los agricultores, además, estos tubérculos ofrecían mayor resistencia a la gota, la enfermedad que más afecta el cultivo de papa. Estas nuevas variedades se conocen como "dorada", "sua pa" y "ocarina".

De esta manera, se apoyó la labor de algo más de 500 cultivadores, miembros de familias vulnerables, quienes han utilizado la producción de papa como capital semilla en las diferentes épocas de siembra.

En ese momento también se entregó una colección de germoplasma, que caracteriza 120 materiales de papa, y la cartilla Saberes y sabores de las comunidades nariñenses, con el propósito de conservar el conocimiento ancestral, gastronómico y nutricional de este alimento.

La docente Mosquera resaltó que con estas papas se llevó a cabo un estudio clínico con niños menores de 5 años. "Logramos ver como su nutrición mejoró en estándares normales después de que estaban en condición de desnutrición".

De igual forma, esta investigación contó con la financiación del Gobierno canadiense mediante el International Development Research Center (IDRC) y el Department of Foreign Affairs Trade and Development (DFATD).

Para la oficial de proyecto de Delphine Larrousse del IDRC, este es un excelente proyecto porque reúne instituciones privadas y públicas, desde la academia, la ONG y la Asociación de Productores, en la que sobresale el potencial para mejorar la nutrición de los pequeños productores y las familias campesinas.

Además, esta iniciativa ganó la competencia internacional entre 180 propuestas, y en este proyecto "la U.N. ha demostrado tener una capacidad inmensa de liderarlo con la experticia de grandes investigadores".

También, se ha contado con la participación de la Fundación Pro del Surco Nariño, con sede en Nariño; el Centro Internacional de la Papa, con sede en Lima, y la Universidad New Brunswick de Canadá.

Finalmente, la docente Mosquera señaló que el objetivo es promover el consumo de estas papas y reemplazarlas por las anteriores, ya que ofrecen mejores beneficios para la salud y son rentables económicamente para los agricultores, asimismo espera que los ministerios de Salud y Agricultura apoyen este desarrollo.

La socialización de esta interesante iniciativa finaliza el miércoles 20 de enero con una salida de campo a la localidad de Usme.