¿Cuáles son las zonas y la distancia promedio en que más roban en Pereira?

Según la Policía Metropolitana de Pereira, entre enero y junio de 2022 se registraron 1.553 hurtos a personas, lo cual representó un aumento del 43 % con respecto al mismo periodo de 2021. Por eso las autoridades vienen implementando estrategias que permitan reducir los índices de inseguridad.

La estadística aparece como un campo fecundo para que las autoridades fortalezcan su capacidad de patrullaje, y así lo demuestran ejemplos como la implementación de seguridad predictiva en el puesto de mando unificado de la Policía de Bogotá, la cual permite saber el lugar que se debe monitorear más según el día y la hora.

Pero en todas las regiones del país no avanza igual, y es aquí donde emerge la experiencia y curiosidad del físico Miguel Ángel Quintero Martínez, magíster en Estadística de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), quien quiso llevar la ciencia a un nivel en donde pudiera aplicarla a problemas cotidianos de las personas, en este caso de los más de 460.000 habitantes de Pereira.

Seguridad predictiva

En su investigación, el magíster implementó algoritmos para crear y estudiar redes complejas, valiéndose de una base de datos de 6.149 delitos reportados como hurto por la Policía Nacional en Pereira y los municipios colindantes de Dosquebradas y La Virginia, entre marzo de 2018 y junio de 2021, cada uno con la modalidad (especialmente atraco a mano armada), el barrio, la dirección, la hora, y el género de la víctima, entre otras variables.

“Se determinó que cuando ocurre un robo en algún punto de la ciudad, a 500 m de allí está ocurriendo otro”, afirma el magíster, cuyo trabajo estuvo dirigido por los profesores Martha Bohórquez y Rafael Rentería Ramos, de la Facultad de Ciencias. Los resultados ayudarían a que los policías puedan patrullar los perímetros más cercanos a estas zonas en donde se presenta una mayor cantidad de hurtos.

“De hecho hubo una particularidad, y es que el municipio de Dosquebradas mostró una tendencia a presentar hurtos cuando ocurren al mismo tiempo en inmediaciones que comparte con Pereira, lo cual llevaría a pensar en los vínculos de crimen que existen entre estos lugares”.

“Los subregistros, que son los datos de las víctimas que nunca denuncian, no serían un problema con los algoritmos, pues al tener como componente principal la distancia en donde se presentan los hurtos y la frecuencia, que puede llegar a ser de varios robos al mismo tiempo en 500 m a la redonda”, indica.

Los algoritmos forman parte de la “red compleja”, que, en el campo de las ciencias de redes, se refiere a una gran red de datos que se interconectan como puntos y líneas, también llamados grafos, que permiten determinar las relaciones espaciales y temporales de algún fenómeno, en este caso el hurto en Pereira.

Así reconocen qué tan cerca está un crimen de otro según las denuncias, y determinan el rango en el que la policía debería actuar para proteger la zona. Todo el proceso es diseñado en el software de programación Python, uno de los más utilizados hoy para crear este tipo de redes.

Los viernes, sábados y domingos los crímenes son más frecuentes por las actividades nocturnas de fiesta o reuniones, mientras que de lunes a jueves la tendencia es que haya más hurtos temprano en la mañana, lo cual estaría relacionado con la jornada laboral de la mayoría de habitantes de la ciudad.

“Una gran ventaja es que esto es una especie de esqueleto para describir lo que está pasando en alguna zona, y podría ser replicado en cualquier otra zona del país para ver las relaciones de distancia entre los crímenes más importantes, además de utilizarla en otros campos como epidemiología, genética o física”, expresa el magíster.