Congreso Internacional de Innovación Social, un camino para hacer posible la paz

Entre el 3 y 4 de noviembre, la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) acoge un encuentro en el que se dan cita académicos y actores sociales provenientes de diversas regiones del país, quienes darán a conocer "a través de conferencias y talleres" las experiencias que pueden servir para vivir y trabajar en un país en paz.

Por ejemplo, los asistentes podrán conocer la experiencia de una fábrica de calzado para mujer dirigida por un ex combatiente de la guerrilla de las Farc hoy desmovilizado.

Indígenas de las comunidades Arahuaca, Camëtsa, Emberá-Chamí, Nasa, Tikuna, Kokama y Yagua presentarán algunos de los proyectos de innovación social que han tenido la posibilidad de realizar junto con profesores y estudiantes de la U.N.

Proyectos como la construcción de tres enramadas en inmediaciones de la población de Manaure, La Guajira, que hoy benefician a centenares de indígenas de la comunidad Wayúu, junto con un policultivo de cachama y bocachico, son algunos de los programas que se podrán conocer en la voz de sus propios protagonistas.

El evento contará con la participación de destacados expertos internacionales, quienes intercambiarán sus experiencias con representantes de las comunidades, muchas de ellas ubicadas en zonas de conflicto.

Uno de los invitados internacionales es Martha Thompson, quien participó activamente en el retorno de refugiados tras la guerra en la República Democrática del Congo, en los tsunamis registrados en Asia y Japón y en el terremoto que devastó gran parte de Haití, además de liderar programas de reconstrucción en países como Somalia, Uganda, Pakistán y Kenia, entre otros.

Experiencias colectivas para generar cambios

Respecto al Congreso, el profesor Carlos Alberto Garzón, vicerrector general de la U.N., afirma que el posconflicto exigirá tareas complejas, como por ejemplo construir una visión colectiva y compartida de largo plazo de lo que será la Nación.

Tal situación, dice el docente, "requiere una adaptación a las nuevas circunstancias, gracias a una confluencia de la experiencia colectiva y de la capacidad de innovar, junto con el fortalecimiento de una institucionalidad que permita hacer realidad el sueño de hacer posible un país con desarrollo sostenible".

En tal sentido, el académico hizo hincapié en la necesidad de considerar aspectos sociales que puedan articularse junto con las metas de carácter económico, haciendo énfasis en la necesidad de fortalecer el tejido social.

Según el profesor Garzón, las nuevas maneras de relacionamiento y convergencia social requerirán que los centros urbanos también comiencen a repensarse para reconstruir un nuevo sistema. Este debe reconocer el valor del aporte hecho por campesinos y comunidades indígenas en materia de sostenibilidad.

"La sociedad entera tendrá que reconocer y compensar este esfuerzo hasta ahora injustamente desconocido", puntualiza el directivo.

Así mismo, el docente destaca que en el fortalecimiento de los saberes ancestrales y sociales la academia juega un importante papel. Esta, dijo, está llamada a entender que el aprendizaje debe tener una doble vía, además de reconocer que existen otras corrientes y cosmovisiones de pensamiento con las que el país debe dialogar.

"El recurso más valioso que tenemos es la inteligencia colectiva y la capacidad innovadora para construir una mejor sociedad, de tal manera que podamos fortalecer nuestra nacionalidad con inclusión, calidad de vida y felicidad", puntualizó el vicerrector general durante el acto de apertura del evento, organizado por la Dirección de Extensión, Innovación y Propiedad Intelectual de la Vicerrectoría de Investigación de la U.N.