Biblioteca de la Sede de La Paz llevará el nombre Alfonso Araújo Cotes, abogado de la UNAL

Como parte del proceso de consolidación de la identidad del campus y su rol en la región, la UNAL Sede de La Paz celebró una votación para escoger el nombre oficial que llevará su Biblioteca, ubicada en el bloque central del campus. Con más de 5.000 volúmenes de material científico y académico, este espacio se constituye en uno de los acervos más completos y relevantes de la región.

Desde su inauguración, la Biblioteca ha sido fundamental para la vida académica y social del campus. Ahora con su nuevo nombre se proyecta como un lugar que inspira y conecta a la comunidad universitaria con su historia y su futuro.

La importancia de un nombre

En la UNAL nombrar un edificio no es un acto trivial; representa un reconocimiento que conecta a la comunidad con su historia y sus referentes locales. En este caso, darle de un nombre a la Biblioteca reafirma el compromiso de la Universidad con la región y con el legado de quienes han contribuido al desarrollo del Cesar.

Mireya Pinzón, profesional especializada del área de servicios de la Biblioteca, destaca la trascendencia de esta decisión como un acto de identidad y reconocimiento. “Es crear un sentido de pertenencia en una comunidad universitaria que ya reclama espacios y una identificación propia”, expresó.

Candidatos con liderazgo regional

La comunidad universitaria tuvo la oportunidad de elegir entre tres figuras destacadas del Cesar, cuya relación con la Institución y sus contribuciones a la academia, la cultura y el desarrollo regional los hicieron merecedores de este homenaje. Ellos fueron Edelma Zapata Pérez, Alfonso Araújo Cotes y José Francisco Socarrás Colina.

Edelma Zapata Pérez es poeta y gestora cultural originaria de La Paz. Estudió Antropología en la UNAL y legó una obra poética rica en tradición y reivindicación cultural, con un reclamo sincero por la justicia social.

El abogado de la UNAL Alfonso Araújo Cotes fue gobernador, diplomático y promotor de la educación y el desarrollo en el Cesar; apoyó activamente el desarrollo de la UNAL Sede de La Paz con una visión de la educación como motor de transformación territorial y desarrollo social.

El médico de la UNAL José Francisco Socarrás Colina realizó estudios de especialización en Psiquiatría y Psicoanálisis. Fue pionero de la educación en la región y es recordado por su trascendental aporte a la formación de docentes y su influencia en la investigación académica del país.

Un ejercicio de comunidad

La votación, realizada el pasado 5 de noviembre en modalidad presencial, contó con una destacada participación de estudiantes, docentes, administrativos y egresados, lo que demuestra su interés en construir un símbolo de unidad y desarrollo académico.

La jornada cerró con un total de 208 votos, el 70,7 % de los cuales fueron de estudiantes, lo cual refleja el interés de la comunidad estudiantil por consolidar un espacio que simbolice su identidad y fortalezca su sentido de pertenencia.

Tras el escrutinio, el nombre de Alfonso Araújo Cotes fue elegido por mayoría de 105 votos (53,06 %). Más allá de ser una simple identificación, este nombre se convierte en el rostro del conocimiento y la cultura que convergen en la Biblioteca de la UNAL Sede de La Paz, espacio democrático y de intercambio de saberes.

Este homenaje simboliza el potencial del Cesar, un lugar donde la memoria y el saber se entrelazan para fomentar el crecimiento intelectual y el diálogo intergeneracional. La Biblioteca seguirá siendo un pilar esencial en la formación de líderes comprometidos con el desarrollo de su territorio.