Avanza primera cohorte de estudiantes de la U.N. en Sumapaz

Después de desarrollar el diseño académico "con la participación de las facultades de Ciencias y Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.)", que buscaba reforzar los conocimientos adquiridos durante el bachillerato, en 2014 y 2015 se trabajó con cerca de 7.000 estudiantes en tres cohortes. 

Debido a que la mayoría de los jóvenes vive en el corregimiento de Nazareth y su desplazamiento diario hacia el centro académico resultaría prácticamente imposible, la Dirección de Bienestar de la U.N. Sede Bogotá facilita un acompañamiento académico permanente, gracias a la presencia de tres tutores que viven en la región, junto con el desplazamiento de los demás docentes a la zona.

"Durante el semestre académico todos los días sale un camioneta que traslada a los profesores de la U.N. hasta Nazareth para desarrollar sus actividades académicas en un antiguo colegio del distrito, contiguo al hospital del corregimiento", comenta José Ismael Peña Reyes, decano de la Facultad de Ingeniería.

Además de garantizar la alimentación diaria de los 17 estudiantes, ellos también han accedido a un apoyo económico equivalente a medio salario mínimo mensual por cuatro meses, cada semestre, que se complementa con actividades culturales y deportivas que buscan integrarlos al conjunto de la comunidad académica.

Así comenzó el programa

Producto de una solicitud formulada por la Secretaría de Educación de Bogota a la Facultad de Ingeniería de la U.N., en 2014 se implementó un plan para mejorar las competencias académicas de estudiantes y bachilleres de colegios distritales, que después condujo a la puesta en marcha del Programa de Admisión Especial y Movilidad Académica (Peama) ofrecido en cinco pregrados de la localidad de Sumapaz.

El programa de fortalecimiento de competencias académicas comenzó a implementarse en 14 colegios del distrito, tras determinar que el número de estudiantes que finalmente accedía a la educación superior de calidad no superaba el 5 % de los estudiantes que terminaban su formación académica como bachilleres.

"La principal deficiencia que encontramos entre los estudiantes era la baja capacidad de entender un texto escrito. Debido a ello tampoco lograban comprender problemas matemáticos y, por obvias razones, no podían resolverlo", explica el profesor Peña Reyes, para quien el problema terminaba por afectar todo el desempeño académico.

Una vez aplicados los correctivos encaminados a mejorar esta competencia, gracias a la asesoría de lingüistas y literatos de la U.N., comenzó a desarrollarse el programa de fortalecimiento en las demás áreas del conocimiento, además de un componente de orientación vocacional y adaptación a la vida universitaria, con una intensidad total de 400 horas por semestre, que arrojó un balance positivo.

Como parte del proceso de admisión para otra cohorte de estudiantes del Peama Sumapaz, 61 aspirantes presentaron el examen de admisión para iniciar sus estudios el próximo semestre.

"Para 2018, el Consejo de Sede deberá definir si se mantienen o extienden a otros programas", precisa el profesor Peña, quien llama la atención sobre la necesidad de formar profesionales en estas regiones alejadas del caso urbano.

Uno de los principales objetivos del programa es que los estudiantes entiendan que la localidad de Sumapaz es el páramo más grande del mundo y la reserva de agua más importante del país: formar intelectuales conscientes de que cualquier daño al páramo tendrá consecuencias irreversibles en el futuro de todos los colombianos.