Así se puede “rendir” la mano de obra en las construcciones de Arauca
Parte de la planificación se encuentra en la distribución de la mano de obra. Los obreros, al igual que las columnas en una edificación, sostienen parte del éxito en una construcción, por eso es fundamental establecer el tiempo que tardan en rellenar, excavar o incluso pintar. A esto se le denomina “rendimiento de la mano de obra”.
Para generar datos sobre dicho indicador en Tame (Arauca), que respondan a las necesidades de la región, la ingeniera civil July Andrea Velandia Castillo, magíster en Construcción de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), realizó un análisis en 8 proyectos de vivienda unifamiliar en el municipio, de manera que los resultados sirvan como referencia para disminuir los retrasos en las entregas y las pérdidas económicas.
Para el caso de Arauca se debe tener en cuenta que un trabajador no rinde igual bajo un calor intenso de 35 °C que en un clima templado como los de la región Andina. Y aunque parezca obvio, la realidad es que los datos que suelen utilizar en el gremio de la construcción son determinados por la Cámara Colombiana de Construcción (Camacol), que toma como referencia las ciudades principales como Bogotá, Medellín o Cali.
Con su investigación, la ingeniera civil deja una tabla de referencia lista para que el gremio en Arauca puede usarla. Allí establece, por ejemplo, que una actividad como la excavación en material común de 0,0 a 2,0 m de profundidad puede ser realizada por un ayudante de construcción con un rendimiento de 2,51 m2 por día, lo que significa que este sería la “cantidad” de trabajo que podrá realizar en un día en dicha área.
“Durante 4 meses tomamos datos de las 8 empresas de la construcción que realizaban proyectos de vivienda unifamiliar en Tame, motivada en parte por el crecimiento urbano que está teniendo el municipio. Allí escogimos 10 actividades de cimentación para evitar la dispersión de los datos y que pudiéramos encontrar una tendencia a la actividad”, expresa la investigadora.
Otro de sus resultados mostraría que el 74 % de los constructores encuestados suelen alterar los datos del rendimiento con la intención de que se acomode a los objetivos planteados.
“Esto es problemático porque ellos desconocen las condiciones con las que se ejecuta el proyecto y por eso se ven alterados. Por ejemplo, en los datos de Camacol dice que una cuadrilla de trabajadores tiene un rendimiento de 250 kg el manejo del acero, pero en Arauca esa cifra puede ser de unos 174 kg, así que pueden dejarlo en 300 kg, desconociendo cuáles son las verdaderas condiciones de su proyecto”, explica.
El rendimiento de la mano de obra es un cálculo que toma como referencia la cantidad de trabajo ejecutado sobre el tiempo que se emplea para dicha actividad. Normalmente puede ser expresada como metro cúbicos por hora, día o unidades por hora.
Tomando como referencia ese indicador, se establece una metodología que permita tomar los datos de la hora de inicio y final con el fin de identificar el tiempo empleado y la cantidad ejecutada. Así, toma 619 registros por día, lugar, obra específica, unidad de medida, conformación de cuadrilla y empresa que ejecutó la obra.
El objetivo es claro: evitar los retrasos en las obras, pero para eso la magíster recomienda realizar más estudios que cuenten con la participación de las empresas con la finalidad de obtener datos precisos y reales.