Escudo de la República de Colombia Escudo de la República de Colombia
/Ambiente, soberanía y prácticas ancestrales, bases para un sistema de salud rural
Salud

Ambiente, soberanía y prácticas ancestrales, bases para un sistema de salud rural

    El difícil acceso a servicios de salud, la falta de personal médico y la distancia que deben recorrer las personas en las zonas rurales del país agudizan las brechas en materia de salud. Por ello, la Red Salud Paz, una iniciativa de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), y otras instituciones de educación superior proponen un modelo de salud rural que incluya el cuidado al territorio, la soberanía alimentaria, la recuperación de prácticas ancestrales y la participación de las comunidades, el cual impactaría en la paz de los territorios.

    Según el Ministerio de Salud y Protección Social (Minsalud), la mortalidad infantil es más alta en las zonas rurales del país: mientras en 2018 en las áreas urbanas morían 11,1 de cada 1.000 nacidos vivos, en las zonas rurales la cifra asciende a 13,6 menores. La situación es la misma en otros indicadores como la mortalidad materna, el bajo peso al nacer, e incluso las muertes asociadas con enfermedad diarreica aguda.

    Aunque el 95 % de los colombianos están afiliados al sistema de salud, aún existen rezagos para acceso a estos servicios en municipios, veredas o corregimientos de las áreas dispersas del país, que muestran un índice mayor en necesidades básicas insatisfechas, y que en algunos casos se ven afectados por la presencia de grupos armados ilegales.

    Justo por esa necesidad evidente y por la urgencia de implementar la paz en el país, en 2017 surgió la Red Salud Paz, una iniciativa que se da en el marco de las tareas que adelanta Red Paz UNAL, con San Vicente del Caguán y La Macarena (Meta) como municipios priorizados, ya que son dos zonas que intentan construir la paz luego de años de una violencia desmedida que afectó a sus pobladores, y que a pesar de haberse priorizado en el Acuerdo de Paz con la antigua guerrilla de las FARC, la salud sigue siendo un problema.

    El docente de la UNAL Mario Hernández, director de la Red Salud Paz, considera que “estos municipios son la prueba de que el sistema de salud actual no es compatible con las zonas rurales. Es clara la necesidad de transformar el modelo de aseguramiento con un sistema más cercano a las personas, al campo y a la ruralidad”.

    En estos municipios no hay una atención en urgencias oportuna para accidentes laborales ni para la atención prenatal o los partos, lo que puede desencadenar en muertes maternas. Incluso en la vacunación infantil hacen falta acciones claras. Para solventar estas situaciones las personas deben ir hasta Florencia (Meta) o Neiva (Huila).

    Como un objetivo para acercar la salud a las comunidades, en 2022 la Red Salud Paz estableció las casas comunitarias para la salud y el buen vivir, que se componen de cuatro ejes: un servicio de salud que llegue a los territorios; ambiente, agroecología y soberanía alimentaria; saberes populares en salud y prácticas ancestrales; y memoria y organización social.

    “Las casas comunitarias buscan que la misma comunidad sea la que genere propuestas sobre las necesidades de su territorio e incluso puedan hacer una veeduría sobre el derecho a la salud”, asegura el profesor Rafael Malagón, director del Departamento de Salud Colectiva de la UNAL y miembro de la Red Salud Paz.

    El buen vivir para la salud

    Concebir la salud no solo como la ausencia de enfermedad sino como la defensa del territorio, con condiciones para la soberanía alimentaria y el reconocimiento de las prácticas ancestrales integrados a los saberes de la comunidad, forma parte del concepto de “buen vivir para la salud”, fundamental en el proyecto de la UNAL.

    “Este es un concepto de los pueblos originarios que pone en el centro el cuidado de la vida, la armonía con el medioambiente y las relaciones de reconocimiento de la naturaleza y que permite sentar las bases para un sistema de salud”, destaca el experto.

    Para el docente es un concepto aplicable a los municipios de La Macarena y San Vicente del Caguán, eliminando la intermediación privada en las zonas rurales, además de procesos de prevención profundo tanto individual como colectivamente que disminuiría las enfermedades y con ello los gastos en salud.

    Esta lógica del proyecto se relaciona con las propuestas de la reforma a la salud presentada por el gobierno de Gustavo Petro, la cual ya fue aprobada en el primer debate de la Cámara de Representantes. A pesar de las modificaciones a la propuesta del gobierno, uno de los artículos aprobados tiene que ver con un modelo de salud preventivo, predictivo y resolutivo que se fundamente en la atención primaria de salud.

    Sin embargo, una de las preocupaciones a la reforma se relaciona con la administración de los recursos por parte de la Adres, que será la encargada de girar el dinero a los Centros de Atención Primaria (CAPS), entre otras funciones.