Algoritmo para detectar minas antipersona tuvo éxito en un experimento
El desarrollo consiste en un radar de penetración terrestre que procesa rápidamente la información para validar si se trata de una mina antipersona. Así como un oído diferencia el sonido sutil de un vaso u otro objeto, el algoritmo utiliza ondas electromagnéticas, las mismas con las que funciona la radio y la televisión, la telefonía celular o los hornos microondas. Cuando estas impactan un objeto bajo tierra, producen resonancias específicas que se pueden identificar, analizar y, en menos de un minuto, determinar si se trata de este tipo de artefacto.
Como complemento del algoritmo se utilizaron antenas especializadas y un sistema digital, los cuales permitieron enviar y recibir ondas electromagnéticas a través del terreno y procesar las señales generadas.
Andrés Junior Gallego Garcés, doctor en Ingeniería - Ingeniería Eléctrica, y Francisco Román Campos, profesor de la Facultad de Ingeniería, explican: “buscamos una alternativa para superar las limitaciones de los detectores de metales convencionales, en especial en terrenos colombianos debido a la fabricación artesanal de las minas antipersona”.
Estas armas letales cargadas con explosivos y camufladas bajo tierra en territorios permeados por el conflicto como Antioquia, Meta, Nariño y Caquetá, han convertido a Colombia en el segundo país, después de Afganistán, con el mayor número de víctimas; así lo dio a conocer el Comité Internacional de la Cruz Roja en 2021.
El método convencional, que emplea detectores de metales, resulta lento y muchas veces ineficiente. Estos dispositivos, similares a los utilizados en las playas, requieren de un barrido meticuloso, pero su principal dificultad es que identifica objetos metálicos que no siempre representan peligro.
La complejidad de este problema radica en que las minas se hacen no solo de una tecnología robusta, sino que también se han empleado materiales básicos como botellas plásticas o tubos de PVC, que son difíciles de rastrear.
Ante este panorama, en el Estadio de la UNAL los expertos realizaron pruebas utilizando modelos de minas y detonadores enterrados, no solo para validar el sistema, sino también para entrenar al algoritmo en reconocer de manera confiable las características electromagnéticas asociadas con estos artefactos explosivos.
“Aunque logramos el objetivo de que el algoritmo identificara dichos objetos, el verdadero desafío está en llevar la tecnología a entornos reales de campos minados, un paso crucial que implica obtener permisos, colaborar con organizaciones especializadas y enfrentar diferentes terrenos para hacer pruebas más amplias”, señala el ingeniero Gallego.
Este experimento sienta las bases para una tecnología que tiene el potencial de revolucionar la detección de minas antipersona en Colombia, ofreciendo una solución más rápida y eficiente para combatir este flagelo.
“El algoritmo se podría incorporar en un robot que funcione como un vehículo autónomo, realizando barridos en terrenos peligrosos y detectando la presencia de minas sin exponer vidas humanas”, precisó el investigador.