Además de sus acciones por el agua, el plan incluye algunos componentes como gestión social y educación ambiental, ahorro y uso eficiente de la energía eléctrica, manejo integral de los residuos sólidos y los residuos peligrosos, manejo adecuado de la flora, gestión de la fauna silvestre, espacios y zonas verdes y condiciones de habitabilidad del campus.
La formulación inició en el segundo semestre del 2010 y comprende etapas de diagnóstico, evaluación, formulación de estrategias e implementación. En este momento se culmina la fase de diagnóstico, en la que destaca la detección de fugas en los campus El Volador, Río y Robledo.
Agua
Esta es precisamente la prioridad del trabajo del equipo. A este recurso vital, eje articulador de la economía de toda comunidad, no se le ha dado el mejor uso. Actos como dejar una llave abierta más de lo necesario o no alertar sobre alguna fuga en la tubería aunados a la demora en atenderla contribuye a su agotamiento.
"El plan está orientado a optimizar el uso del agua. Esto implica gestionar o inducir en la comunidad universitaria una cultura de respeto frente a ese recurso", anotó Adrián Perpiñán Guerra, coordinador de la iniciativa en Medellín.
Además de estos aspectos en educación ambiental, otro de los puntos consiste en atender las fallas en los sistemas de acueducto, alcantarillado y evacuación y manejo de aguas lluvias.
El equipo investigador también tiene como prioridad la atención de situaciones que no son fáciles de detectar, como fugas de la red madre, instalada a unos 80 cm o 1,20 metros de profundidad. Para ello, el Plan contempla un programa de detección con el apoyo de EPM. Con la ayuda de equipos especiales se han perseguido los escapes subterráneos para intervenir posteriormente.
Seis fugas fueron encontradas en la primera jornada de rastreo en El Volador. Los correctivos en este sentido van desde reemplazo de piezas hasta cambio de tuberías.
Por último, Perpiñán resaltó el trabajo sobre manejo adecuado de los reactivos y sobrantes de las pruebas de laboratorios. "Esto para evitar que esas sustancias lleguen a la red de alcantarillado y contaminen en mayor proporción las aguas que la Universidad genera y que finalmente entrega a la red de alcantarillado municipal", dijo. El plan, junto con la Dirección de Laboratorios, contempla adelantar acuerdos para optimizar los procesos en este sentido.
Una vez consolidado el diagnóstico, se presentarán los planes de mejoramiento con el aval de la Vicerrectoría y de manera concertada con las dependencias pertinentes.