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Medioambiente

Residuos sólidos urbanos de San Andrés servirían como materia prima para la construcción

    En la Isla, de apenas 26 km2, los residuos se queman para producir energía. Del paso por las calderas quedan remanentes que se podrían emplear para mejorar pavimentos o construir mobiliario urbano como bancas y papeleras, entre otras alternativas. Investigadores de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Medellín le apuestan al afianzamiento de una economía circular.

    El manejo de residuos en sitios como las islas suele ser complejo, pues por su geografía y atractivo en ellas confluyen dos factores cruciales: estar apartadas en medio del océano y recibir turistas que generan gran cantidad de desechos. Aunque en San Andrés la generación de residuos varía según la temporada, datos recopilados por la Global Advisory Hub (GAIA) señalan que en la Isla suele llegar hasta 80 toneladas diarias.

    “Por su espacio reducido y sus dinámicas económicas, la Isla tiene un serio problema de disposición de residuos sólidos urbanos. Por eso en 2012 se instaló una planta de incineración que puede transformarlos en electricidad, a partir de la quema y los gases generados”, señala el profesor Óscar Jaime Restrepo Baena, integrante de los grupos de investigación Observatorio Ígnea, del cual es director, y Cemento y Materiales de Construcción, y del Instituto de Minerales (Cimex) de la UNAL Sede Medellín.

    Cuando termina el proceso de incineración quedan otros residuos llamados escorias, sales cálcicas y cenizas. Por eso, con el fin de proyectar una economía circular, los investigadores plantean la posibilidad de usarlos en la industria de la construcción, que además suele ser muy limitada en San Andrés porque no hay minas para obtener materiales.

    "Para la presentación del proyecto ante el Sistema General de Regalías –en el cual salió beneficiado junto con la Empresa de Energía del Archipiélago de San Andrés (EEDAS), la Gobernación del Archipiélago de San Andrés, la Providencia y Santa Catalina, la Universidades del Cauca, la Corporación del Laboratorio al Campo, INVIAS y Cementos Argos–, la UNAL Sede Medellín diseñó una metodología que incluye el ajuste del protocolo de muestreo de los remanentes (escorias, sales cálcicas y cenizas) y su traslado a los laboratorios para hacer las pruebas de caracterización físicas, químicas y mineralógicas, que se hacen mediante fluorescencia de rayos X, microscopía electrónica de barrido y análisis térmico diferencial, entre otros métodos".

    “La etapa siguiente consiste en identificar posibles usos a partir de la bibliografía y comparar lo que se ha hecho en otros sitios con los resultados que obtuvimos, frente a lo cual hallamos concordancias muy favorables”, apunta el profesor Gustavo Adolfo Viana Casas, integrante del grupo de investigación Observatorio Ígnea de la UNAL Sede Medellín.

    Agrega que “después de esto se da el proceso de experimentación en laboratorio, para el que hacemos mezclas con los remanentes y otros materiales como arenas, gravas y cemento. Ahora, aunque la literatura demuestra que es posible obtener resultados óptimos, es necesario idear pilotos en laboratorio para hacer pruebas de resistencia, ver cómo se comportan estos materiales frente a la permeabilidad del agua o la erosión provocada por el viento, entre otros fenómenos naturales”.

    “Antes de concluir el proyecto en un 100 % –queda cerca de un año y medio para la finalización–, la idea es identificar las necesidades de productos específicos de la comunidad de San Andrés, saber qué necesitan, qué formas y colores les interesan, y dejarles instalado el proceso, de manera que ellos lo sigan usando productivamente de ahí en adelante para su propio beneficio”.

    Por parte de la UNAL, participan los grupos de investigación Observatorio ÍGNEA y Grupo del Cemento y Materiales de Construcción - (CEMATCO), de la Facultad de Minas y de la Facultad de Arquitectura de la Sede Medellín, además del Grupo de Rehabilitación de estructuras de madera, acero, hormigón y compuestas (Remahc), quienes vienen avanzando en los procesos de experimentación e innovación de productos.