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Ciencia y Tecnología

Reactor nuclear colombiano entra de nuevo en operaciones

  • Reactor que se encuentra en el Servicio Geológico Colombiano.

  • La piscina consta de un cilindro de 5,25 metros de profundidad.

  • Centro de control del reactor nuclear.

  • Los participantes del Segundo Colegio de Física Nuclear que se celebra en Bogotá tuvieron la oportunidad de visitar el reactor.

  • Tablero explicativo sobre cómo funciona el reactor.

  • Jaime Sandoval, supervisor del reactor nuclear, del Sistema Geológico Colombiano.

Aprovechando esta coyuntura, la Universidad Nacional adelanta gestiones para renovar el convenio que se tenía con el Servicio Geológico Colombiano (SGC).

"Actualmente se discuten aspectos como qué aportaría cada una de las instituciones o qué experimentos se desarrollarían de forma conjunta", afirma Fernando Cristancho del Grupo de Física Nuclear de la U.N.

Para el investigador, este reactor nuclear, único en el país, es una máquina de análisis multielemental, que requiere pequeñas cantidades de microgramos como muestra.

Esto lo hace muy útil en la aplicación de técnicas forenses, en las que con una sola hebra de cabello se pueden obtener muchos datos de un cadáver. También se puede utilizar en estudios de geología, arqueología, farmacia y otras áreas de investigación de la U.N.

El anuncio de la entrada en funcionamiento del reactor nuclear se hizo durante el Segundo Colegio de Física Nuclear que se realiza en Bogotá, cuyos participantes tuvieron la oportunidad de conocerlo.

La licencia de operación para cinco años fue entregada por el Ministerio de Minas y Energía y el proceso de renovación representó la formación de personal del SGC por parte de la Agencia Internacional de Energía Atómica.

Después de la capacitación, el Ministerio, autoridad reguladora, realizó las verificaciones respectivas, con expertos internacionales que evaluaron a los operadores en temas específicos. Incluso hubo exámenes psicológicos por ser esta una actividad de cuidado.

Certificación internacional

Para maniobrar el reactor se necesita un grupo mínimo de operarios. Supervisores, responsables de mantenimiento u operadores son roles que no se pueden repetir, es decir, cada persona debe tener disponibilidad para cubrir cada una de estas funciones.

"Una vez que aprobamos estas pruebas fuimos certificados, cada uno tiene su respectiva acreditación como operador", explica Jaime Sandoval, supervisor del reactor nuclear del SGC.

Según el experto, es importante obtener la licencia porque es posible hacer más aplicaciones de forma inmediata, como el análisis por activación neutrónica, que consiste en activar una muestra para observar o examinar su composición interna, de acuerdo con los elementos de la tabla periódica.

Aunque estas pruebas también se pueden realizar en laboratorios de química, donde la técnica es muy buena, tiene la desventaja de que es un análisis destructivo, es decir, que la muestra se utiliza una vez y se destruye.

En el reactor nuclear la muestra se irradia y se estudia su composición, la cual queda radioactiva. "Se deja decaer la muestra y después de que la configuración atómica se estabiliza, puede volver a irradiarse y a estudiarse posteriormente", afirma Sandoval.

A través de la datación por huellas de fisión (proceso que consiste en hacer incidir neutrones sobre un núcleo pesado para que este se divida en dos), es posible identificar en qué lugares existe uranio en Colombia, establecer si se puede hacer exploraciones para encontrar petróleo o contribuir a la producción de radioisótopos como el oro 198.

¿Cómo es el reactor nuclear?

El IAN-R1 fue adquirido en los años en que el presidente de Estados Unidos Dwight Eisenhower lanzó el plan "Átomos para la paz", que buscaba impulsar la producción de energía nuclear a bajo costo.

En plena Guerra Fría, Washington buscaba apoyar a los países de su línea frente a la amenaza comunista. Los riesgos de la energía nuclear no eran aún debatidos públicamente.

De esta manera el Gobierno norteamericano donó este artefacto a Colombia con fines investigativos. Aunque cuenta con una potencia de 100 kilovatios, solo opera con 30.

Está compuesto por una consola de control, una piscina principal, un sistema de purificación y enfriamiento de agua, sistemas de seguridad radiológica y sistemas auxiliares de seguridad física.

La piscina en la que se encuentra instalado el núcleo es un cilindro que tiene 5,25 metros de profundidad, 2 metros de diámetro y 6 mm de espesor de pared. Está construida de acero inoxidable y rodeada de una estructura escalonada de concreto en forma de hexágono.

Se encuentra llena de agua destilada y desmineralizada que cumple condiciones de pH y conductividad específicas, con el fin de preservar de la corrosión los elementos combustibles nucleares y los de soporte del núcleo.

El núcleo está construido por grupos de cuatro barras de uranio-235, rodeadas por elementos de grafito, los cuales cumplen la función de reflexión de neutrones para enriquecer la reacción en cadena. Algunos de los grupos de cuatro barras solo tienen tres de uranio y una cuarta de boro.

Como se trata de producir electricidad, el calor liberado en la fisión es utilizado para crear vapor, el cual mueve una turbina, que a su vez impulsa un generador de electricidad.

El reactor tuvo un proyecto de renovación e instrumentación que se terminó de hacer en el 2012 por el Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares de México.

"Los expertos del Instituto transfirieron tecnología y ahora se tiene una nueva instrumentación que responde a los estándares de la Agencia Internacional de Energía Atómica y que está disponible con mayores beneficios con respecto a la anterior", señaló Sandoval.

El Segundo Colegio de Física Nuclear que se celebra en Bogotá es organizado por la Universidad Nacional de Colombia y la Universidad de los Andes, en cooperación con la Agencia Internacional de la Energía Atómica y el Servicio Geológico Colombiano.