Salud
Sin cultura de seguridad laboral el país no alcanzará competitividad
Inmobiliario, manufactura, construcción, comercio y agricultura son los sectores donde ocurren los mayores números de accidentes laborales en Colombia.
Bogotá D. C., 09 de diciembre de 2013 — Agencia de Noticias UN-Aunque en las últimas dos décadas el número de personas afiliadas se ha duplicado (la cifra ha pasado de 3 millones a 8.400.000) todavía falta reforzar los aspectos relacionados con la prevención de los riesgos laborales.
Solo en 2012 se presentaron 609.881 accidentes de trabajo en Colombia y se calcula que 113 personas por cada cien mil padecen alguna enfermedad laboral, especialmente relacionadas con los problemas osteomusculares.
Se trata de cifras altas que convierten los riesgos laborales en una prioridad para el Gobierno y los empresarios, pero también para los trabajadores.
“Es impensable que logremos reducir la siniestralidad laboral o mejorar las condiciones de trabajo sin que los valores de una cultura de la seguridad formen parte de la cotidianidad del trabajo y de la realidad del empresario”, afirmó Amparo Lozada, docente de la Facultad de Enfermería de la Universidad Nacional de Colombia.
Durante el Foro “Retos y perspectivas en la formación en salud y en el trabajo en un mundo globalizado”, realizado como parte de la celebración de los 30 años del Programa de Especialización en Salud Ocupacional, Lozada mencionó también otros importantes desafíos que debe afrontar este sector de la salud.
El mundo se enfrenta a un cambio de paradigma en todos los órdenes y esta transformación incluye también una nueva realidad laboral. Por ejemplo, algunas encuestas realizadas en países del primer mundo han revelado que los trabajadores eligen la empresa en la que quieren estar, dependiendo de los estándares en seguridad laboral que estas hayan implementado.
“Existen nuevos materiales y nuevas tecnologías como las relacionadas con la biotecnología o la nanotecnología, también con las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), aunque sabemos muy poco de ellas. Además, en países como Colombia, donde se mezcla el trabajo artesanal con el tecnificado, esto hace que nuestros profesionales sean más versátiles”, amplía Lozada.
Asimismo, en opinión de la docente se debe dotar a los profesionales de las mejores herramientas para la evaluación y análisis de los riesgos laborales, especialmente ahora que los sistemas de trabajo están cambiando, por ejemplo, en aspectos como el teletrabajo.
Por su parte, Juan Carlos Aristizábal, subdirector de la Cámara Técnica de Riesgos Laborales de Fasecolda, destacó algunos de los elementos claves que debe tener en cuenta el profesional que trabaje en el área de la salud ocupacional.
“Debe saber comunicar, tener habilidades en educación de adultos, tener buenos conocimientos en la recolección, procesamiento y análisis estadístico y conocer la legislación, porque el profesional de esta área se convierte en un asesor para el empleador y el trabajador, y un buen porcentaje de los accidentes que ocurren están directamente relacionados con la parte legal”, señaló Aristizábal.
Las cifras internacionales de los riesgos laborales muestran que cada año ocurren 125 millones de accidentes laborales en el mundo, de los cuales 220.000 tienen consecuencias fatales.
Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), independientemente de las dificultades económicas y de las tensiones generadas por la competividad a nivel mundial, la Constitución de la OIT obliga a los 173 Estados miembros de la organización a proteger a los trabajadores contra la enfermedad y los accidentes en el marco de su ocupación.
En los países en desarrollo, los trabajadores más expuestos a riesgos de carácter profesional son los ocupados en la agricultura, las industrias primarias de extracción y la industria pesada.
(Por: Fin/DMH/sup/AC)N.° 797