Salud
¿Qué hay de cierto en la publicidad de medicamentos en TV?
Según un estudio del Departamento de Farmacia de la Universidad Nacional de Colombia, cerca del 70% de la publicidad de los fármacos es engañosa.
Bogotá D. C., 07 de febrero de 2012 — Agencia de Noticias UN-Entre otros aspectos registrados en la investigación, este porcentaje corresponde a los anuncios que, dentro de su mensaje, omiten información necesaria del medicamento y hablan de indicaciones que no han sido aprobadas por el Invima.
Lo que hicieron los estudiantes del Departamento de Farmacia, entre ellos Alexánder Montaña, fue una comparación con respecto a la reglamentación y a la parte sanitaria regida por el Invima y por la Superintendencia de Comercio en Colombia, de cara a lo que están promocionando en el medio televisivo.
Se encontró que un 65% de las indicaciones que se presentan en publicidad no son estipuladas en el prospecto del proyecto publicitario que se le entrega al Invima; por lo tanto, son indicaciones no permitidas, que no se presentan como tales al consumidor, de manera textual, sino que aparecen como imágenes. Un ejemplo de esto “es el caso de un cosmético en el cual aparecen indicaciones terapéuticas que, preferiblemente, serían de un analgésico, para tratar patologías como la gota o la artritis; es decir, son para un medicamento pero aparecen en la publicidad diciendo que el cosmético puede curar este tipo de enfermedades”, comenta Montaño.
Por lo general, en este tipo de publicidad aparece un médico, un expendedor de drogas o un químico farmacéutico promocionando el medicamento. Con esto, según Montaño, se le plantea al consumidor un teatro de visita o una consulta médica, lo cual no se basa en las indicaciones sobre la información presentada, sino en la confianza generada por el hecho de que un profesional de la salud lo esté recomendando, asunto que puede llevar a un uso irracional del fármaco.
Lo último que se analizó es la comparación competitiva entre los medicamentos, tanto de las indicaciones como de las características, lo que lleva a promocionar, sin una base documental y sin investigaciones específicas, que cierto fármaco puede ser superior o mejor que otro, con lo cual se puede producir información errónea.
Se concluye que la publicidad de medicamentos de venta libre en Colombia se caracteriza por proponer un marketing agresivo, más que plantear un uso racional.
La propuesta que surge del estudio es que haya un trabajo conjunto entre el Invima y la Superintendencia de Industria y Comercio para evitar esa publicidad engañosa, de tal forma que se le permita al televidente contar con herramientas necesarias para elegir el medicamento necesario con un sentido crítico.
(Por: Fin/hes/sup/vbr)N.° 295