Desarrollo Rural
Patrimonio cultural y recursos naturales también son desarrollo rural
El Chocó y su herencia musical, La Guajira y sus artesanías, Nariño con su gastronomía y el Meta con sus parques naturales nacionales son ejemplos del desarrollo rural articulado con la agroecología, que pueden coexistir en algunas regiones del país.
Medellín, 04 de mayo de 2016 — Agencia de Noticias UN-Hernán Porras, director de la Corporación de Estudios, Educación e Investigación ambiental, Colombia; Jairo Alexander Osorio Saraz, decano de la Facultad de Ciencias Agrarias y Claudia Ranaboldo, coordinadora del programa de Desarrollo Territorial Rural con Identidad Cultural.


Asimismo, Antioquia cuenta con 342.000 hectáreas exclusivas para resguardos indígenas, donde se generan condiciones de agroecología y desarrollo interno para las mismas comunidades, sin tener mayores efectos en las condiciones de la región.
De esta manera lo expresó Claudia Ranaboldo, coordinadora del programa de Desarrollo Territorial Rural con Identidad Cultural, que pertenece al Centro Latinoamericano para el Desarrollo Rural (Rimisp), durante una sesión del “Diplomado Internacional en Agroecología y Desarrollo Territorial: Identidad Cultural”, de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional Sede Medellín.
Según la experta, patrimonios culturales y recursos naturales deben ser entendidos como otra forma de desarrollo rural y territorial. Se trata de fortalezas que el país puede explotar en un eventual proceso de posacuerdo.
Un momento clave como el que afronta Colombia, con la posible firma de un tratado de paz, da pie para recuperar la deuda histórica con los campesinos, indígenas y afrodescendientes, pero más importante que eso, señaló la experta: “es un período fundamental para afirmar nuevos modelos de desarrollo, paz, convivencia y ciudadanía, haciendo un desarrollo rural territorial con identidad cultural, al establecer puentes multiniveles dentro y fuera de cada territorio”.
En su opinión, es necesario que el país apueste por las fortalezas de cada región. “Con la visión del desarrollo territorial y en particular desde la valorización del patrimonio biocultural, es necesario explorar las riquezas del territorio”, subrayó la funcionaria.
Durante su intervención, la experta chilena precisó que existen experiencias en las que algunas poblaciones desarrollan empleo rural no agrícola, pues entienden que sus regiones son potenciales en otros aspectos acordes a sus tierras y costumbres.
Además, destacó: “se trata de comunidades fuertemente golpeadas por la guerra y el olvido, por lo que se hace necesario trabajar y segmentar el tema de la cultura”, indicó la funcionaria del Programa que cuenta con presencia en seis países de Latinoamérica.
En su opinión, es necesario crear los puentes o las articulaciones necesarias entre ciudad-campo, retornados-campesinos, población-gobierno, que permitan establecer una relación directa que facilite la generación de políticas públicas.
(Por: fin/AGG/dmh/APBL)N.° 651