Política & Sociedad
Legado del sociólogo Orlando Fals Borda, más vigente que nunca
Con actividades culturales se le rindió tributo a la memoria y las enseñanzas del sociólogo colombiano fallecido en agosto de 2008, quien se dedicó a rescatar y visibilizar los saberes de los indígenas, afrodescendientes, palenqueros, raizales, campesinos, colonos y artesanos.
Bogotá D. C., 09 de junio de 2017 — Agencia de Noticias UN-La alegría de la música afrocolombiana, palenquera y raizal consiguió que, de repente, saliera el Sol en una lluviosa Bogotá. El ritmo contagió por igual a profesores, indígenas, invitados extranjeros y, como no, a los representantes de la comunidad afrodescendiente. “Venimos a este lugar a rescatar la cultura”, se escuchaba en el tremendo vozarrón de las cantadoras, mientras los asistentes danzaban y aplaudían.
Poco después, ya dentro de la Capilla de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) Sede Bogotá, tras toda una mañana de actividades culturales y académicas –como la presentación de la reedición del libro Campesinos de los Andes y otros escritos antológicos, la intervención del coro de la Institución interpretando el Mensaje a Colombia, compuesto por el mismo Fals Borda–, un profesor dijo en voz alta: “Orlando está aquí con nosotros”.
En efecto, así sucedió. Su memoria también se manifestó en la actividad de cierre, una solemne ceremonia en la que el capellán de la Universidad, Ricardo Londoño, el reverendo Milton Mejía –de la comunidad presbiteriana–, un abuelo indígena y un abuelo afrodescendiente resaltaron la investigación, el compromiso y la coherencia que acompañó al sociólogo barranquillero durante toda su vida.
Al respecto, Jesús Rodolfo Giagrekudo, médico tradicional y sabedor de la comunidad uitoto e integrante del grupo Saber y Vida, del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales (Iepri) de la U.N., comentó que así como sus abuelos y mayores siguen viviendo, en la medida en que ellos aún practican sus enseñanzas, el legado del sociólogo Fals Borda también continúa vigente, ya que se trata de una fuente que aún forma y constituye sabiduría.
“Nos enseñó que el conocimiento está afuera, no solo en las aulas. Descubrió que estaba en el campesinado, los indígenas, los diferentes grupos étnicos. Nos enseñó que si nos unimos y participamos ante nuestros sueños y anhelos se llega a algo, a la paz, a la tranquilidad”, complementó.
Por su parte, Daira Elsa Quiñones, representante y conocedora de la comunidad afrocolombiana, palenquera y raizal, señaló que esta aula viva para la paz, liderada por la Institución, facilita el encuentro de diferentes grupos étnicos con el fin de seguir fortaleciendo la preservación y la visibilización de los saberes ancestrales.
Según la representante Quiñones, esta es la mejor manera de mantener firme la idea de la Investigación Acción Participativa, enfoque propuesto por el maestro Fals Borda y de gran impacto no solo en Colombia sino en el mundo: “las universidades tienen un papel preponderante en reconocer dichos saberes y apoyar su afianzamiento”, indicó.
Entre tanto, el profesor Fabio López, director del Iepri, destacó que “en el Instituto tuvimos la oportunidad de compartir su calidez humana, sus búsquedas intelectuales y políticas. Creía mucho en Colombia, en la paz y en la democracia”.
El docente agregó que el gran aporte de Fals Borda consistió en la apertura de los saberes universitarios a otras lógicas sociales: “desde su trabajo de Investigación Acción Participativa hizo énfasis en la necesidad de que la academia dialogara con los saberes populares. De igual manera, dejó un gran legado de compromiso con el cambio social en el país”.
(Por: fin/JFMM/dmh/LOF)N.° 929