Ciudad & Territorio
Las ciudades tienen menos lugares de encuentro
Los espacios públicos que facilitan el encuentro de los ciudadanos van desapareciendo, mientras otros escenarios se vuelven cada vez más inaccesibles.
Bogotá D. C., 29 de junio de 2017 — Agencia de Noticias UN-El arquitecto y urbanista sudafricano Gerhard Bruyns, actual profesor asistente en Medioambiente y Diseño de Interiores en la Hong Kong Polytechnic University, visitó la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) en el marco del taller “Bogotá río”, organizado por el Departamento de Arquitectura y Urbanismo de la Facultad de Artes de la Institución.
En diálogo con la Agencia de Noticias UN, el experto compartió sus puntos de vista respecto a la situación actual del urbanismo internacional, basado en su experiencia en Sudáfrica, Holanda y Hong Kong.
Agencia de Noticias UN (ANUN): según su experiencia en diferentes lugares del mundo, ¿cómo ve la situación actual de las ciudades?
Gerhard Bruyns (G.B.): la gente está protegiendo cada vez más su propiedad y la situación está empeorando: vemos ciudades que prácticamente se están militarizando, con espacios más pequeños, más puertas, más avisos que prohíben la entrada a ciertos edificios o lugares. Esto se ve en México, Bogotá, Sudáfrica, Nigeria, en Asia, en todo el mundo... La noción de los sitios donde la gente se reunía, propia de los tiempos romanos y de la Edad Media, ha ido desapareciendo. Las ciudades necesitan ser reconsideradas.
ANUN: en ese sentido, y considerando su experiencia en muchos lugares del mundo, ¿qué se puede aprender de cada cultura?
G.B.: ninguna ciudad es perfecta, pero hay cosas buenas en diferentes lugares. Los holandeses, por ejemplo, parece que deliberadamente complican la movilidad con el fin de forzar a la gente a pensar en medios de transporte más económicos y sostenibles como la bicicleta. Un taxi en Holanda es un lujo. De los asiáticos se puede aprender la rapidez en términos de pensamiento y ejecución.
ANUN: precisamente, ¿cómo ha sido su experiencia en ese continente?
G.B.: en Asia el panorama es completamente diferente. Vemos megaciudades, cinco o diez veces más grandes en términos de tamaño y número de habitantes. Las obras se hacen muy rápido: una reunión, un taller y a ejecutar. Por el contrario, en Sudáfrica y en Holanda se discute el tema ético, la parte económica y otros asuntos. Construir una línea de tranvía se tomaría allí unos diez años, mientras que en Singapur lo harían en uno.
ANUN: ¿cómo ha sido la experiencia urbana reciente en Sudáfrica?
G.B.: hasta 1994 lo urbano estaba marcado por el tema racial: el movimiento, el acceso a espacios públicos como restaurantes... las ciudades estaban prácticamente militarizadas, protegidas: unos temían que los negros llegaran en cualquier momento a robar, y otros a que los blancos invadieran nuevos espacios. Todo se transformó después de ese año.
ANUN: ¿y en Holanda?
G.B.: allí pasa todo lo contrario: siempre hubo un sistema antiguo, siglos de estabilidad. Aunque la inmigración de los turcos y recientemente la de los refugiados sirios ha supuesto pequeñas inestabilidades y pequeños desafíos.
ANUN: pasando a Bogotá, acá se habla de una deficiencia en cuanto al espacio público, ¿cómo enfrentar dicha problemática?
G.B.: no creo que ustedes tengan un problema con el espacio público. El desafío es repensar su programación: no todo tiene que ser verde, no todo tiene que ser bonito. Lo público es público y es libre para todos.
ANUN: ¿algo para destacar en su visita a la ciudad?
G.B.: me pareció fantástica la iniciativa de las ciclovías los domingos y festivos. Es algo que reunifica la ciudad. Es fenomenal ver quién está en las calles. Me encantaría que esto se hiciera en otros lugares, ya que la bicicleta deja de ser un medio recreativo y se convierte en un medio para que uno descubra su propia ciudad. Y así descubrí a Bogotá, tras recorrer 28 kilómetros.
(Por: fin/JFMM/MLA/LOF)N.° 36