Política & Sociedad
"La deshumanización de la guerra nos estaba acabando como sociedad"
Así lo aseguró Patricia Linares, presidenta de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), durante el encuentro de la iniciativa Memoria Transitiva, que reunió en la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) a más de 40 artistas, activistas y académicos de países como Indonesia, Canadá, Perú, Uganda, Colombia e Irlanda del Norte, para intercambiar experiencias sobre este tema.
Bogotá D. C., 19 de febrero de 2020 — Agencia de Noticias UN-No obstante, la abogada aseguró que el país ya ha reaccionado y atraviesa por una etapa en la que se están buscando salidas que obligatoriamente van más allá de la construcción de memoria, aunque muchos consideren que esta reproduce el dolor de manera innecesaria y motiva la polarización y la confrontación.
La presidenta de la JEP habló desde su posición al frente de este organismo encargado de administrar justicia en el posconflicto, un modelo que, según aseguró, tiene como motivo fundamental arribar a una verdad plena, lo que desde su mirada significa “mantener la memoria de una guerra de más de medio siglo, de tal manera que dignifique y contribuya de manera efectiva a la no repetición”.
La funcionaria formuló estos planteamientos durante su intervención en el conversatorio desarrollado en el marco del encuentro de la red internacional Memoria Transitiva, organizado por la Universidad de British Columbia, en Canadá, en alianza con la UNAL y el Colectivo de Comunicaciones de los Montes de María.
En el encuentro –moderado por la docente de la UNAL Martha Nubia Bello–participaron M. Kamari Clarke, antropóloga experta en la Corte Penal Internacional y profesora de la Universidad de California; Patricia Tobón Yagarí, indígena embera y miembro de la Comisión de la Verdad, y Aimée Craft, abogada indígena canadiense experta en comisiones de verdad y profesora de la Facultad de Derecho de la Universidad de Ottawa (Canadá).
Memoria como legado
La profesora Craft aprovechó su intervención para recalcar la importancia de la construcción de memoria en casos como el de las escuelas residenciales, en el que cerca de 150.000 niños indígenas de Canadá fueron enviados para ser reeducados en los valores occidentales, instituciones de las que muchos de ellos nunca regresaron.
Para la docente, la memoria es activa, y ejemplo de esto fue la reconstrucción de los hechos que se dio alrededor de este caso a partir de los testimonios de los sobrevivientes, lo que permitió cambiar una narrativa que había sido configurada solo a partir de los archivos de la Iglesia y del Estado canadiense como las únicas fuentes de información sobre este caso de violencia masiva.
Otro ejemplo expuesto por la profesora Craft fue el de la Comisión de Investigación sobre Mujeres y Niñas Indígenas Desaparecidas y Asesinadas, que en su informe del año pasado reveló que miles de mujeres indígenas fueron víctimas de violencia endémica en Canadá, dejando entre 1989 y 2012 cerca de 1.200 mujeres y niñas asesinadas o desaparecidas.
Para la docente, en ambos procesos los testimonios y la participación de los sobrevivientes y de sus familias fueron considerados como actos de reparación para muchas comunidades, quienes participaron en la construcción de un archivo legado, en el que más allá de documentar sus experiencias se dejó su relato para que las nuevas generaciones aprendan de él.
(Por: fin/ALP/MLA/LOF)N.° 150