Ciencia & Tecnología
Dos corredores impulsarían ejes minero-industriales en Antioquia
Establecer un corredor tecnológico entre Marmato y Urabá, y otro entre Medellín y Puerto Berrío, jalonaría el desarrollo de ejes minero-industriales y una nueva industrialización en Antioquia, dentro de la Cuarta Revolución Industrial en la región.
Medellín, 21 de julio de 2020 — Agencia de Noticias UN-Esta es la propuesta de tesis de Manuela Rentería y Manuela González, estudiantes de Ingeniería Geológica de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Medellín e investigadoras del Grupo Gemma (Georrecursos, Minería y Medio Ambiente), presentada el pasado 15 de julio.
El objetivo es impulsar el desarrollo tecnológico en zonas estratégicas para darle valor agregado a materias primas mineras y llevar el departamento a un desarrollo del siglo XXI, cambiando el rol de exportadores al de desarrolladores tecnológicos, aprovechando potenciales en energía, conexión vial y ubicación privilegiada.
El primer corredor tecnológico recorrería los proyectos Marmato, Quebradona –en Jericó–, seguiría por Santa Fe de Antioquia en cercanías del proyecto Buriticá, atravesaría el Túnel del Toyo y llegaría a Urabá.
El corredor tecnológico 2 parte de Medellín, atraviesa el túnel de La Quiebra, pasa por los proyectos de Cisneros y Gramalote y llega a Puerto Berrío.
Para desarrollar estos corredores se dispone de importantes recursos como acceso a fuentes de energía (hidroeléctrica y alternativa), buena conexión vial, disponibilidad de materia prima, como oro y cobre, agregados y carbón, y fuerza laboral especializada.
Los corredores tecnológicos conectarían los principales centros de producción y puertos de Colombia: Medellín, Bogotá y Cali (Triángulo de oro) se conectarían desde Urabá con los puertos de Buenaventura, Cartagena, Barranquilla y Santa Marta.
Así, se facilitaría el ingreso a mercados de Centroamérica, Estados Unidos y la Unión Europea, y a mercados asiáticos atravesando el Canal de Panamá. En este corredor minero-metalúrgico-industrial del cobre, se construiría un Centro de Excelencia.
En el Corredor Tecnológico 1 hay proyectos de interés, pues en Urabá se construye Puerto Darién, en Necoclí, y Puerto Pisisí y Puerto Antioquia, en Turbo, que serían entregados en 2021 y 2022. Con ellos se reduciría el 35 % de los costos de exportación de productos desde Medellín, que ahora se llevan hasta Cartagena.
Hay Zona Franca en Apartadó e iniciativas de generación de energía no convencional, como el Proyecto Urabá con zona fotovoltaica en Apartadó; el Proyecto Basura por energía, que aprovechará residuos del relleno El Tejar en Turbo, y la producción de biocombustibles en una planta de producción de etanol a partir de excedentes de banano no exportado (120.000 ton/año) y residuos generados (600.000 ton/año).
El corredor tecnológico 1 potenciaría el desarrollo de varios proyectos mineros. Marmato con reservas de 14 millones de onzas de oro; Quebradona, con 1,3 millones de toneladas de cobre y 2,3 millones de onzas de oro, y Buriticá, con 3,7 millones de onzas de oro.
Con estos proyectos se dispone de materia prima suficiente, por lo que se propone no solo exportarla, sino transformarla industrialmente para darle valor agregado y mayor competitividad y desarrollo a la región.
Urabá sería una ubicación estratégica para construir un centro de procesamiento, en el que se refinaría el cobre chileno, peruano, panameño y el de Colombia.
Transformar e industrializar
Manuela González explicó que en la mina se obtienen concentrados de cobre, oro y plata, que con procesos metalúrgicos se transforman en cátodos de cobre con pureza del 99,99 %.
Ahí Colombia tiene una gran oportunidad, porque en Quebradona se transformaría en concentrado con 28 % de cobre para exportarlo. Para esta transformación necesita energía, agua, y crear una planta metalúrgica-industrial en la que además se obtendrían productos semiterminados como alambrón, barras, tubos y finales como chips, tornillos, cables, para la industria tecnológica de computadores, celulares y tablets.
Si los gobiernos nacional y departamental impulsan este Centro Metalúrgico se podría transformar además el cobre de Perú, Chile y Panamá, para convertir la región en polo de desarrollo industrial.
Para valorizar el oro se podría constituir un gran centro de joyería de altísima calidad, con el oro colombiano y las esmeraldas, o piedras preciosas de otros países. Y se podría constituir un gran banco de reserva federal donde guardar las reservas de oro de América Latina.
En el corredor tecnológico 2 también hay proyectos mineros importantes: Cisneros, con reservas de 110.000 onzas de oro, y Gramalote, con 5-7 millones de onzas de oro.
Para adelantar estos corredores, Colombia necesita crear un Centro Tecnológico de Cuarta Revolución Industrial con tecnología de punta, que integre academia, industria, sociedad y entidades de apoyo. La apuesta de Gemma es crear un Centro Tecnológico con inversión público-privada.
(Por: OLM/MLA)N.° 712