Desarrollo Rural
Aumenta la producción de corderos en el país
El potencial de producción de estos animales en Colombia se debe a los trabajos en el campo reproductivo, así como al mejoramiento alimenticio y sanitario.
Bogotá D. C., 22 de octubre de 2015 — Agencia de Noticias UN–En Colombia, la producción de carne de ovinos y caprinos (cabras y chivos) es todavía muy baja frente a la demanda. Foto: Archivo Unimedios


El trabajo de la U.N. ha permitido aumentar la producción de corderos para el aprovechamiento de su carne.


Ovejas con mejor peso, aumento de crías y mejoramiento genético son algunos de los grandes logros del Centro de Investigación, Desarrollo Tecnológico y Extensión Ovina (Cidteo) de la Universidad Nacional de Colombia Sede Palmira, que desde 2011 ha venido trabajando con razas criollas y foráneas.
Según estudios en la tipología criolla, con hembras de peso adulto de 43 y 56 kilos (k), han nacido corderos entre 29,3 y 32,9 k a los 180 días de edad, lo que se traduce en tasas de ganancia diaria de peso entre 0,145 y 0,165 k por día (k/día).
En otras tipologías estudiadas, como la Romney Marsh, Corriedale y Hampshire, con hembras de peso adulto de entre 54 y 67 k, sus crías llegan a pesar entre 33,5 y 42,2 k a la misma edad de las criollas, con ganancia diaria de 0,165 a 0,215 k/día. El potencial de crecimiento de estas tipologías raciales se aprecia en animales para sacrificio que pesan entre 35 y 40 k a una edad de entre 6 y 8 meses, proporcionan una carne magra, de agradable color y suave al corte.
Además, en el Cidteo se avanza en el reconocimiento de la composición de la carne (aspectos físicos, químicos y de percepción sensorial) del animal sacrificado (canal o carcasa), particularmente en la identificación y tipificación de ventajas que ofrecerían mayor competitividad.
En consecuencia, en la primera etapa del trabajo investigativo en el Cidteo se estructuró un programa para manejar los ritmos reproductivos en el rebaño, de manera que se obtuvieran períodos entre partos para gestación, lactancia, recuperación posparto y reapareamiento de las hembras.
Ritmos reproductivos
Asimismo, en los sistemas productivos que presentan intervalos de partos entre 320 y 365 días o más, se ha incorporado un programa de apareamientos controlados para propiciar partos entre 270 y 300 días, lo que significa un leve aumento de partos por hembra. Estos logros garantizan el abastecimiento del mercado en volúmenes constantes y de calidad uniforme (edad, peso y composición).
La eficiencia reproductiva también se ha incrementado: fertilidad entre 79,6 % y 86,9 % general para el rebaño y, en el caso particular de las hembras, hasta en un 97 %, según los profesores Henry Grajales, director del Cidteo, y Carlos Manrique, investigador vinculado al proyecto.
A estos resultados han contribuido trabajos como el realizado por el profesor Harvey Lozano, de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, quien en abril de 2015 recibió su título de doctorado de la Universidad de Namur (Bélgica) por sus estudios para determinar y caracterizar los fenómenos fisiológicos de los ovinos.
Estos contemplan la presencia de estacionalidad, características del ciclo estral (época de celo), inicio de la pubertad, niveles de fertilidad, características del eyaculado (en machos) y perfiles de hormonas reproductivas vinculadas con el desempeño reproductivo que involucran tanto a la hembra como al macho ovino.
Por otro lado, para el mejoramiento genético, el rebaño se maneja con un programa de apareamiento por núcleos familiares dentro de cada tipología racial y a cada núcleo de hembras se le asigna un macho de su misma tipología. De las crías nacidas se tiene información genealógica y se adelanta un monitoreo desde el nacimiento hasta el destete, cuando se utiliza el índice de selección de corderos del Cidteo, que contempla el desempeño del cordero y de sus ancestros.
En cuanto al manejo de la nutrición, se organizó un sistema de pastoreo rotacional basado en el suministro de pasto kikuyo (Pennisetum clandestinun), y complementos alimenticios según requerimientos de las diferentes categorías animales, que incluye sal mineralizada y agua a voluntad.
Por otro lado, en el manejo del sistema productivo se partió de un rebaño base de 200 hembras y 28 reproductores. A la fecha se cuenta con 540 corderos producidos para una carga estimada en el Centro Agropecuario Marengo de entre 10 a 26 animales por hectárea.
Dichas estudios corresponden a un programa de investigación–extensión que cuenta con recursos de Colciencias por 3.025 millones de pesos, éste ha permitido mantener la gestión tecnológica para el desarrollo productivo y el mejoramiento de la competitividad de los sistemas de producción.
De igual manera, se realizó el programa Granjas Piloto, que reunió a productores base, líderes de referencia y multiplicadores vinculados con las asociaciones regionales, con el objeto de capacitarlos en diferentes aspectos de manejo del rebaño e implementar y validar resultados de las investigaciones desarrolladas.
Lea el artículo completo en http://www.unperiodico.unal.edu.co/dper/article/crece-el-potencial-de-produccion-de-corderos-en-colombia.html
(Por: Fin/HAA/GAC/dmh/CA)N.° 521