Artes & Culturas
"Una revolución que aún no ha sido" se instaló en la Casa Gaitán
Esta exposición visual temporal, que rescata del olvido la historia de la primera guerrilla latinoamericana, ocupa los distintos espacios de la Casa Museo con proyecciones análogas –filme en 16 milímetros– y una instalación con imágenes en movimiento, además de una intervención en el espacio del vagón del tren, también con fotos y un video.
Bogotá D. C., 10 de diciembre de 2018 — Agencia de Noticias UN-“Una revolución que aún no ha sido” es el nombre de la exposición temporal que ocupa los distintos espacios de la Casa Museo Gaitán. Fotos: Yesid Villamizar, Centro de Divulgación y Medios


La autora de la iniciativa es María Alejandra Rojas –egresada de la Escuela de Artes Plásticas y Visuales de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.)–, quien gracias a esta propuesta no solo ganó una “Beca de Creación para Artistas Emergentes 2018” que otorga el Ministerio de Cultura, sino que, en un hecho sin precedentes, recibió autorización para montar su instalación en la Casa Museo Jorge Eliécer Gaitán, declarada en 1948 como Bien de Interés Cultural nacional.
La artista nos habló en detalle de esta exposición que se podrá visitar hasta el próximo 30 de diciembre, los martes y viernes a las 3:00 p. m. y los sábados y domingos a las 10:00 a. m. y 2:00 p. m.
Agencia de Noticias U.N. (AUN): ¿cómo empezó a concebir esta exposición?
María Alejandra Rojas (MAR): el proyecto nace con la idea de hacer una película. Empecé a investigar sobre el pueblo de mi familia materna y descubrí que allá nació la primera guerrilla de Latinoamérica: los “Bolcheviques de El Líbano”. También vi que esta guerrilla había sido liderada por el gremio de los artesanos del pueblo, relaciones que me parecieron muy interesantes. Además me causó mucha curiosidad que este relato no estuviera tan documentado en la historia de Colombia.
AUN: ¿entonces a qué fuentes recurrió?
MAR: se han hecho trabajos muy importantes; por ejemplo Gonzalo Sánchez –exdirector del Centro de Memoria– hizo tal vez el documento más importante sobre los “Bolcheviques de El Líbano”: recopiló todas sus actas e hizo una historia sobre ellos. En el relato tradicional, cuando se habla de violencia en Colombia, y antes de conocer este aporte, se omite esta historia, se empieza a contar de los años cincuenta hacia adelante, pero no se habla de la primera guerrilla de Latinoamérica, que se levantó en 1929, aunque solo fue por un día.
AUN: ¿encontró fuentes orales que hubieran tenido algún nexo con los hechos?
MAR: sí, empecé a hablar con las personas de la vereda, con mis familiares, con descendientes de los hijos de los bolcheviques y con personas mayores que tenían alguna memoria o alguna relación con ese hecho o con hechos posteriores, porque El Líbano fue, justamente, una zona donde surgieron muchas guerrillas.
AUN: ¿qué información relevante le brindaron esas fuentes?
MAR: no estaba buscando un relato que diera cuenta de una verdad histórica; me interesó mucho la relación de afecto con las cosas, con el espacio, con el pueblo, con los caminos, con los ríos. Empecé a encontrar que, por ejemplo, cuando entrevistaba a los hijos de los bolcheviques, ellos no decían mucho por qué a sus papás los callaron; para mí eso es muy diciente. Además cada uno tiene un lugar de enunciación muy importante, que es haber sido el hijo del revolucionario bolchevique.
AUN: su familia también fue una razón de peso para desarrollar este estudio…
MAR: sí, cuando empecé a investigar descubrí que de mi familia materna, mis tíos-abuelos también habían pertenecido a guerrillas posteriores y esa historia para mi generación había sido negada. Al final decidí usar esta temporalidad del “aún” para referirme a la revolución que no sucedió, que no ha pasado, que aún no ha sido.
AUN: ¿por qué decide apostarle a esta instalación?
MAR: me pareció muy interesante que siendo el país con la primera guerrilla de Latinoamérica no se hubiera dado una revolución en ese sentido; eso ocurría al tiempo que yo descubría el cine analógico. Para mí fue perfecto crear un archivo con este material; además quería experimentar cómo disponer de esto en el espacio, porque la película no solo se puede proyectar en una pantalla y en unas salas, también sentí que podía explorar a manera de instalación con otros materiales.
AUN: es un hecho inédito haber instalado una exposición en la Casa Museo Gaitán, ¿cómo lo logró?
MAR: fui muy afortunada, porque el proyecto tenía una relación temática y temporal con lo que representa Gaitán; porque, además, él visitó El Líbano, y porque María Cano –la primera mujer líder política en Colombia– se reunió con los bolcheviques de El Líbano. Había un montón de cordones que se podían unir.
AUN: ¿cuál es su propósito con esta instalación en la Casa Gaitán?
MAR: activar la Casa Museo. Me parecía chévere activar todos los espacios, porque como que cada lugar y cada objeto tiene algo que contar. Hay una sensación del “estar” que se siente muy diferente en cada uno de los lugares, porque cada uno tiene una funcionalidad diferente. La instalación acabó ocupando todos los espacios de forma sutil.
(Por: fin/DG/MLA/LOF)N.° 690