Ciencia & Tecnología
Radiactividad a pacientes deberá dosificarse con exactitud
Conocer la dosis exacta de radiactividad a la que deben exponerse los pacientes con enfermedades como cáncer es el desafío de la medicina nuclear.
Bogotá D. C., 28 de junio de 2011 — Agencia de Noticias UN -Las terapias nucleares han revolucionado los tratamientos para el cáncer tanto fibroso como endocrino utilizando radioterapia o terapia radio nuclear. De acuerdo con el profesor y físico médico Jim Charles Thurston, del Royal Marsden Hospital de Londres, el uso de estos métodos, además de su efecto curativo, permite obtener diagnósticos en la fase inicial de muchas enfermedades, mejorando las perspectivas del tratamiento.
“Lo anterior es evidente en el caso de tumores malignos de mama, en los que las sustancias radiactivas reconocen las células transformadas por un cáncer antes de que cambien de morfología”, indicó el médico.
Por otra parte, la medicina nuclear permite medir con más precisión la cantidad de radiactividad que debe suministrarse a los pacientes. “Aún no se sabe con exactitud ese dato, de manera que en la mayoría de ocasiones se suministran cifras redondas, lo que representa un riesgo. Se espera que en 10 ó 15 años se pueda determinar la cantidad de radiactividad correspondiente a cada enfermedad”.
Además, en este tipo de medicina es necesario conocer las normas para la ejecución de los procedimientos, “para ello tenemos elementos como el tiempo, la distancia y el blindaje. Con ellos podemos determinar cómo se debe incorporar a un paciente a la exposición radiológica, pero también los pasos a seguir de los médicos, enfermeras y especialistas. ¿Qué tanto deben acercarse a la camilla? ¿Deben llevar puesto delantal plomado?”, explicó María Cristina Plazas, profesora asociada del Departamento de Física de la Facultad de Ciencias.
“Estas radiaciones con energía suficiente pueden modificar eléctricamente la materia, extrayendo los electrones de sus estados ligados al átomo. Esto lo podemos estudiar tanto en el diagnóstico de los pacientes como para los trabajadores de la salud que tienen contacto directo con ellos”, explicó el médico físico.
Esto con el fin de conocer los riesgos de la exposición radiactiva. “La protección en el uso de radiaciones ionizantes es muy importante, por ejemplo, a la hora de conocer la dosis que debe recibir un paciente para un TAC de pelvis o los efectos secundarios que podría causar en una mujer embarazada. También en la detección de los riesgos de incidencia de posible generación de cáncer con determinadas dosis de radiología”, agregó.
Ahora bien, de acuerdo con lo expuesto por Thurson en el curso Nuevas Técnicas de Física Médica en Imágenes Diagnósticas y Tratamientos de Radioterapia en la UN, “el desarrollo nuclear más importante es sin lugar a duda el uso de imágenes de multimodalidad y tomografía de emisión de positrones (PET) de rayos X computarizados. A partir de ellos podemos observar la fisiología completa del cuerpo humano. Lo más novedoso es poder usarlas al mismo tiempo, obteniendo así mejores resultados”.
Su experiencia en el Reino Unido le permite concluir que, debido al alto costo de la medicina nuclear, cada Nación y sistema de salud debe conocer las enfermedades más recurrentes de su población. “Solo así se sabrá si es necesario acudir a esta tecnología. Muchas veces los rayos X son capaces de detectar enfermedades que uno esperaría solo podría hacer un equipo más sofisticado”.
América Latina ha venido avanzando en este campo. Ese es el caso de Brasil, que con un proyecto gubernamental ha ido mejorando las políticas de protección nuclear en muchos de sus hospitales. “La Agencia Internacional de Energía Atómica ha inspeccionado muchos de ellos con resultados sorprendentes”, comentó Thurston.
Finalmente, el experto comentó que si bien el médico tiene un alto grado de responsabilidad a la hora de suministrar la radiactividad, son las autoridades quienes deben garantizar los estándares de seguridad y de implementar las medidas que la intervención demanda.
(Por: Fin/lga/lmp/lrc)N.° 329