Artes & Culturas
Modelos de construcción para preservar uso de la guadua
Una bóveda, una cúpula y una escalera catalana se construyeron en la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) Sede Manizales a partir de materiales tradicionales de la región caldense como guadua y tierra cruda.
Manizales, 17 de septiembre de 2018 — Agencia de Noticias UN-La característica principal de estas tres piezas arquitectónicas es que no usan formaleta (cimbra), lo cual las hace muy fáciles de construir y muy económicas. Además el uso de materiales comunes evita el de tejas de barro, zinc o fibrocemento, que suelen ser más costosas.
Las estructuras se construyeron durante tres días en la “I Conferencia internacional de construcciones con materiales no convencionales” que se está llevando a cabo en las sedes Bogotá, Manizales y Medellín de la Institución.
El profesor Juan Manuel Sarmiento Nova, de la Escuela de Arquitectura y Urbanismo de la U.N. Sede Manizales, manifestó que estas tres piezas se diseñaron a partir de arcos desde el punto de vista geométrico.
El docente hizo énfasis en que “para su construcción se utilizó lata de guadua curvada para darle forma a estas tres estructuras. Además se usó ladrillo hueco cocido, que se recubre con la tierra cruda y arena para que en últimas quede una cubierta”.
Los elementos elaborados sirven para cubrir espacios de construcciones arquitectónicas como viviendas, edificios institucionales, planteles educativos y hospitales.
El docente Sarmiento Nova precisó que estos elementos económicos pueden servir para soluciones prioritarias de vivienda como las de interés social (VIS), o en sitios lejanos y veredas.
Agregó que “con el uso de estos materiales característicos del Paisaje Cultural Cafetero se pretende conservar la tradición de la región; no preservarlos se convierte en un problema de identidad y de falta de reconocimiento del patrimonio”.
Por primera vez en Manizales
Los tres elementos fueron construidos por estudiantes de Arquitectura de la U.N. Sede Manizales, con la coordinación y supervisión de la arquitecta colombiana Lucía Esperanza Garzón, de la Universidad Piloto de Colombia; del profesor Alfonso Ramírez Ponce, de la Universidad Autónoma de México, y del profesor Michele Paradiso, de la Universidad de Florencia (Italia).
La profesora Garzón manifestó que estos ejercicios crean una arquitectura para todos, más accesible y con mayores posibilidades de darles soluciones a las personas de la periferia: “tenemos que pensar en la producción social del hábitat y eso implica darles soluciones a las localidades que lo necesitan a partir de materiales favorables para ellos”.
Agregó que “Colombia tiene un déficit de cerca de 2 millones de viviendas y por medio de soluciones con materiales convencionales e industrializados nunca se podrá mejorar esta problemática. Por eso se tienen que incentivar cada vez más los materiales económicos como la guadua y la tierra cruda”.
La estudiante de Arquitectura Mariana Gómez indicó que estos talleres son necesarios para fortalecer los conocimientos y trabajar en equipo. Agregó que “es importante que las personas dejen de estigmatizar estos materiales, que además de ser una solución para hacer viviendas económicas, también son de buena calidad”.
(Por: fin/JDMP/MLA/LOF)N.° 245