Ciudad & Territorio
Transporte de carga le ocasionaría grandes costos sociales a las Regiones Metropolitanas
El dinero que se pierde a causa de siniestros viales, contaminación y congestión, entre otras externalidades provocadas por el transporte de carga en el área metropolitana de Bogotá, equivale al 4 % del PIB de dicha región, un valor similar al que representa lo que aporta el sector de la construcción.
Bogotá D. C., 15 de diciembre de 2020 — Agencia de Noticias UN-Contaminación, siniestros viales y congestión son las externalidades que más le cuestan al país en materia de transporte de carga. Foto: archivo Unimedios.


Los costos que generan las externalidades en transporte de carga en el área metropolitana de Bogotá equivalen al 4 % del PIB de la ciudad. Foto: archivo Unimedios.


Se requiere mayor seguimiento por parte del Gobierno y de entidades del sector de la movilidad. Foto: Andrés Almeida Guano.


Las externalidades del transporte son costos que asume la sociedad que no están incluidos en el precio del servicio de transporte, y por lo tanto, no son pagados ni por el usuario, ni por el productor.
En las regiones o áreas metropolitanas, existen dos tipos de externalidades del transporte de carga, por un lado las positivas en términos de beneficios para la región, el país y el sector privado, y las negativas que representan afectaciones sobre el entorno, la movilidad y la sociedad, entre otros.
Mediante el desarrollo de un modelo metodológico aplicable en áreas metropolitanas, Ximena Carolina Velandia Villamil, magíster en Ingeniería - Transporte de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), estimó la magnitud de las externalidades del transporte de carga para el caso específico de la Región Metropolitana de Bogotá durante el año 2019, evaluó su expresión espacial en el territorio y valoró sus efectos.
El modelo de fácil replicación para las otras regiones metropolitanas del país integra cuatro externalidades económicas: tres negativas –entre las que se consideran la congestión, la siniestralidad vial y la contaminación por emisiones–y una positiva, que es la producción económica.
Para la estimación de las magnitud de las externalidades, se revisaron los inventarios de emisiones contaminantes, la cantidad de siniestros según su gravedad y los tipos de vehículos involucrados, entre otros datos suministrados por la Agencia Nacional de Seguridad Vial, que permitieron distinguir cuáles están relacionados con transporte de carga.
Para evaluar la congestión se hizo uso de una API de Google que permitió estimar la duración de los viajes con y sin condiciones de saturación. Finalmente, haciendo uso de diferentes referencias nacionales e internacionales las magnitudes obtenidas se lograron valorar en términos económicos.
Fallas del mercado
Para la investigadora, no considerar los costos externos constituye una falla del mercado que se podría contrarrestar con la intervención del Estado, mediante impuestos y regulaciones para facilitar la internalización de estos.
La investigación permitió concluir que hoy, el costo social del transporte de carga en los entornos metropolitanos no se está pagando en su totalidad, dado que las externalidades negativas de este sector no son compensadas como sería lo deseable.
Esto se presenta porque no existen mecanismos de estimación de la magnitud de las externalidades adecuadas, por lo que cuantificar su costo resulta difícil.
La magíster de la UNAL destaca que ya existe un interés por parte del Gobierno nacional por empezar a hacerle seguimiento a estos aspectos del transporte de carga, por esto propone el modelo desarrollado, como una herramienta de estimación y valoración económica para considerar las externalidades como otro elemento de seguimiento adicional a los tradicionales tiempo y costo.
“Esta herramienta es útil para los mandatarios de los distintos departamentos, pues les permite tomar decisiones más adecuadas sobre estos vehículos y no caer en la simple prohibición de ingreso a los cascos urbanos, que en últimas lo que hace es generar más pérdidas”, subraya.
Escenarios de mejora
El estudio propone reflexiones sobre algunos escenarios analizados conceptualmente, como por ejemplo incluir cadenas de distribución metropolitana conformada por trenes, una cadena logística que tendría mejor uso y generaría menor afectación frente a los camiones de carga.
Otro escenario en el que pueden pensar los mandatarios en cuanto a externalidades es hacer variantes o vías alternas para que los camiones no entren a los cascos urbanos municipios que conforman las regiones metropolitanas que es donde finalmente se perciben más fuerte las externalidades.
Por último, otra opción es cambiar la flota de camiones, modernizarlos y reemplazarlos por una flota eléctrica de última milla que ayudaría a disminuir las externalidades como la contaminación, una de las que más siente la ciudadanía y la que representa altos.
(Por: fin/SMC/MLA/LOF)N.° 373