Análisis
Desarrollo del agro en Colombia, muy regular
La tendencia demuestra que desde los años 50 el salario de los pequeños productores campesinos ha aumentado apenas el 1 % en proporción.
Bogotá D. C., 31 de agosto de 2015 — Agencia de Noticias UN-“El éxito del sector agrícola tiene que ver con el ingreso de los campesinos”, aseguró Albert Berry, candidato en 2004 al Premio Nobel de Economía y experto en temas agrarios, quien analizó el censo agropecuario frente a la transformación agraria.
En el Auditorio Camilo Torres, de la Facultad de Derecho, durante el Seminario de Emprendimiento Rural, el experto señaló que las estadísticas sobre el agro en Colombia evidencian un desarrollo regular, más cercano a lo deficiente.
Según lo explicó el economista, el éxito del sector agropecuario se evidencia desde tres variables: la contribución al producto interno bruto nacional (PIB); el aporte de la exportación en una región y su impacto sobre el ingreso.
El experto hizo énfasis en la importancia de contar con información del agro en el país y centró su análisis en el último censo agrario, realizado en 2014, frente al anterior, que tuvo lugar en 1970. “No hubo una fotografía durante 45 años, lo cual es una desventaja enorme, pues los comentaristas y analistas han adivinado durante los últimos años”, precisó.
Lo que se pudo visualizar con el censo, que tuvo en cuenta 17.457 predios y 23 municipios, es que la agricultura en la mayoría de casos es un trabajo de familia. Los campesinos reciben además un ingreso no agrícola e incluso producen solo para el autoconsumo.
“El salario y los ingresos son más importantes que el aumento de producción, ya que nos dice quiénes están recibiendo los beneficios de este aumento en el consumo”, ratificó.
La investigación halló que el 69,9 % tiene menos de 5 hectáreas y ocupa solo el 5 % del área censada, mientras que terrenos de más de 500 hectáreas están en manos del 0,4 % de los propietarios y representan el 41,1 % de las 113 millones de hectáreas censadas.
El censo corrobora que Colombia sigue siendo un país con alta concentración de la propiedad rural. Los elementos estructurales, personales y políticos son la clave, un ejemplo de esto es la educación.
Según el Censo Nacional Agropecuario, el analfabetismo en zonas rurales del país alcanza el 11,5 % en mayores de 15 años; además, el 20 % de niños entre 5 y 16 años no asistió a ninguna institución.
El analista también se refirió a Colombia como un país poco exportador, aunque las cifras publicadas por el Dane indican que 7 millones de hectáreas en el área rural están destinadas a cultivos tipo exportación.
A mediados de los 90, la distribución de la fuerza de trabajo agropecuaria cambió. Según el economista, en los últimos 15 años ha habido una sorprendente baja en el porcentaje de la fuerza de trabajo agrícola, que pasó de un 50 % a un 35 %.
Por otro lado, el conflicto armado ha sido determinante, además de la corrupción y la injusticia. Como explica el analista, políticas que podrían determinar el éxito en el agro como el tema de subsidios para el campo, muchas veces se ven empañadas por la corrupción, pues no llegan a los destinatarios.
El estudio también revela que el campo tiene un bajo nivel de capitalización, toda vez que el 83,3 % no cuenta con maquinaria para realizar su actividad.
La hipótesis que surge de sus conclusiones frente a los datos analizados es que la agricultura comercial, responsable de la mayoría de los ingresos del campesinado, ha ido bajando la demanda.
A su turno, Steven Helfand, historiador con doctorado en Agricultura y Economía aclaró que el éxito en el campo también depende de la productividad de la mano de obra. “El pequeño productor puede tener un rendimiento alto; una de las formas de manejar la productividad es incorporando la tecnología”, sostuvo.
(Por: Fin/NADC/MLA/AC)N.° 135