Ciencia & Tecnología
Avanzan estudios sobre cáncer de cérvix
El Grupo de Investigación en Hormonas de la Universidad Nacional de Colombia identificó una lista de proteínas que podrían estar implicadas en la metástasis del cáncer de cérvix.
Bogotá D. C., 12 de julio de 2010 — Agencia de Noticias UN–“La proteómica, es decir, el estudio colectivo de las proteínas conlleva un análisis más detallado de lo que realmente ocurre en una célula, bien sea animal, vegetal o de un microorganismo. La información que se obtiene puede aprovecharse para realizar modificaciones en esas células y desembocar en grandes beneficios en el campo de la salud”, asegura la química Myriam Sánchez, directora del Grupo de Investigación en Hormonas (GIH), del Departamento de Química de la UN, pionero en el país en implementar esta técnica para el estudio de enfermedades como el cáncer de cérvix, también llamado cáncer de cuello uterino.
Este cáncer es considerado como el más frecuente en mujeres y está fuertemente ligado a los países llamados en vías de desarrollo, donde se presenta el 80% de los casos registrados en el mundo, según el Instituto Nacional de Cancerología.
Lo paradójico es que la principal causa de muerte de las pacientes afectadas ocurre por la metástasis o diseminación del cáncer a otros órganos, característica especial de este tumor maligno que ha suscitado su estudio a partir de la proteómica, herramienta científica contundente para conocer en profundidad los aspectos moleculares de la enfermedad.
Durante la última década, con apoyo del Instituto Nacional de Cancerología, el GIH ha estudiado líneas celulares derivadas de tumores provenientes de mujeres con cáncer de cérvix, y gracias a la aplicación de la proteómica, en los últimos tres años logró identificar 22 proteínas relacionadas con el proceso de migración e invasión celular. De éstas, seis no habían sido identificadas previamente y podrían ser blancos farmacológicos, es decir, útiles para la creación de medicamentos que controlen la metástasis.
Para analizar las muestras, los investigadores tuvieron que enviarlas a las universidades de Estocolmo (Suecia) y Federal de Río de Janeiro (Brasil), con las que el GIH ha establecido convenios de colaboración debido a la carencia de equipos especializados en el país para este tipo de estudios.
“En Colombia, a pesar de que se cuenta con profesionales idóneos para este tipo de análisis, no existen laboratorios con los equipos necesarios para realizar un estudio proteómico completo”, advierte la profesora Sánchez.
En Latinoamérica, algunos países tienen laboratorios dotados de la infraestructura necesaria para estas labores: Venezuela, en el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas; Uruguay, en el Instituto Pasteur en Montevideo, y Chile, en el Laboratorio de Proteómica en la Universidad Católica.
Cuba, por ejemplo, se ha convertido en líder mundial de la aplicación de tecnologías en esta materia. Actualmente, el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de La Habana cuenta con uno de los pocos grupos de investigación en el mundo capaz de identificar cerca del 100% de proteínas en un microorganismo simple.
Como en los humanos, cada proteína cuenta con una huella digital que le permite ser distinguida de las demás. Esto evidencia la complejidad de la proteómica que, si bien requiere de técnicas sofisticadas para su estudio, también demanda un gran esfuerzo pedagógico para vencer en los científicos la falta de información acerca del tema, en una región donde, por ejemplo, las altas cifras de cáncer de cérvix deberían ser cuestión del pasado, concluye la profesora Myriam Sánchez.
(Por: Fin/lmp/feb/dss)N.° 957